Por Carlos Macías Palma

Si Moreno Valle hubiera conocido la oficina del Auditor Superior del Estado, seguramente hubiera despedido a su titular.

Nadie podía tener algo mejor que él.

Esa oficina es un museo, un privilegio lejos del pueblo noble, tonto, ignorante y mantenido.

Es una oficina espléndida, pero cuyas funciones son de carácter político.

Alguien, no sé quién, dijo que a la Auditoría Superior del Estado era “un garrote político”.

En verdad lo es.

¿Quién va a castigar a José Luis Márquez, ex presidente municipal de Zacatlán? Bueno si es que hubiera incurrido en actos de corrupción.

O ¿Quién va a denunciar penalmente a Angélica Alvarado Juárez, ex presidenta de Huejotzingo? ¿Quién? ¿El alcalde Roberto Solís? ¿Tiene pruebas? Y si las tuviera, una simple llamada telefónica las elimina.

Mmmm

¿Quién más?

¿A poco Pedro Tepole ex alcalde de Tehuacán terminará en la cárcel?

Más aun, esta señora, Irene Olea de Izúcar de Matamoros ¿Será castigada si hubiera algo? 

Y así, al menos 200 ejemplos municipales poblanos.

La Auditoría Superior del Estado es como la policía auxiliar o los guardias de seguridad privada:

Espanta borrachos.

He dicho.

…

Ni Obama

Parece que a “La Operación Barredora” no la detiene, ni Obama. (Y que bueno).

…

El Verdugo

Nuevas dirigencias estatales de partidos políticos en Puebla, se acercan en estos días. El Verdugo dice: Ninguno consulta a sus bases.

…

De Buena Fuente, no es la mejor columna política, pero tiene… a los mejores lectores.

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