¿Y qué tal la vida en México?
La vida es muy peligrosa.
No por las personas que hacen el mal, sino por las que se sientan a ver lo que pasa.
Albert Einstein (1879-1955). Científico alemán.
El clima de inseguridad, la impotencia, la desesperación y la falta de oportunidades para mejorar la calidad de vida son solo algunos ingredientes del espectro sociopolítico que está atravesando el país. Si bien la radicalización de los manifestantes –estudiantes y maestros normalistas en Guerrero- ha llegado al extremo con actos de violencia, éstos se deben en parte a la falta de una respuesta inmediata por parte de la autoridad local y federal. El enriquecimiento sospechoso y empoderamiento político del ex alcalde y su esposa demuestran que la corrupción no distingue ni género ni ideología política.
En tanto este tipo de eventos suceden en nuestro país, que paradójicamente se encuentra en el grupo de naciones consideradas más desarrollados, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) –cuestión inverosímil de creer- el propio organismo dio a conocer un documento denominado How was life, que no solo incluye un apartado general donde compara en diferentes rubros a los países integrantes (34) sino que dedica también uno en particular para cada país, entre ellos México.
Esta iniciativa de la OCDE se publica cada 2 años y aborda temas vinculados a la calidad de vida, en concreto a 11: ingresos y riqueza; empleo y salarios; vivienda; salud; equilibrio entre la vida personal y el trabajo; educación y competencias; relaciones sociales; compromiso cívico y gobernanza; calidad del medio ambiente; seguridad personal y bienestar subjetivo.
En términos generales, México ocupa el penúltimo lugar en el escalafón del organismo al hacer un estudio comparativo con respecto a los demás países. En seguridad es último lugar al tener 22.9 homicidios por cada 100 mil habitantes, mientras que la media de los miembros de la OCDE es de apenas 4.2, es decir, más de 5 veces por arriba del promedio. En cuanto a homicidios y asaltos, México ocupa el segundo y primer lugar, respectivamente, con los índices más altos: en el primero de ellos es uno de los tres países que sostiene dos dígitos con 23.4 homicidios. Los otros dos son Brasil (25.5) y Rusia (12.8). En el otro extremo, el Reino Unido y Japón son los que presentan los índices más bajos, con apenas 0.3 homicidios. En el tema de asaltos, México es el único país que tiene dos dígitos al llegar a 12.8 mientras que el segundo lugar, que es Brasil, tiene una tasa de 7.9 asaltos por cada 100 mil habitantes. Por su parte, Canadá y Polonia reflejan los nivele más bajos con apenas 1.3 y 1.4 casos, respectivamente.
En educación los índices tampoco son alentadores. Solo el 40% de la fuerza laboral mexicana cuenta con un título de nivel medio superior, mientras que el promedio en la OCDE es del 74.6%. Asimismo, y de acuerdo a las evaluaciones realizadas a través del Programa para la Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA, por sus siglas en inglés), arrojó que los estudiantes mexicanos en promedio obtuvieron 417 puntos en asignaturas como lectura, matemáticas y ciencias, mientras que el promedio en la OCDE es de 497.
Finalmente, en este rubro, México es el penúltimo lugar en años-educación, con un tiempo de 15.2 años, apenas por encima de Luxemburgo que arroja 14.1 años. En contraparte, Finlandia posee el promedio más alto con 19.7 años.
Países con mayor y menor promedio de años de estudio (primeros y últimos tres lugares)
País | Años promedio de estudio | País | Años promedio de estudio |
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19.7 |
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15.7 |
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19.5 |
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15.2 |
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19.2 |
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14.1 |
Fuente: Elaboración propia con información de: http://www.animalpolitico.com/2014/10/mexico-el-ultimo-lugar-de-la-ocde-en-seguridad-y-educacion/
Es de deducir, pues, que ante un bajo nivel de educación, el ingreso familiar sea bajo en consecuencia. De acuerdo al estudio realizado, en México el ingreso familiar promedio por hogar al año asciende a 12,850 dólares, cifra que lo ubica en el penúltimo sitio de los países miembros, superando apenas a Brasil, que tiene un ingreso de 10,310 dólares. Por su parte, los de mayor ingreso son Estados Unidos (39,531 dólares), Luxemburgo (35,635 dólares) y Noruega (32,093 dólares).
Y es que a pesar que el ingreso es bajo en el país, las horas de trabajo son de las más altas en el organismo, lo que permite concluir que la remuneración no es proporcional al tiempo que se labora: mientras que en México la gente labora alrededor de 2,226 horas al año (poco más de 8 horas en promedio), la media en los países de la OCDE asciende a 1,765 horas, es decir, casi 7 horas a la semana.
Ahora bien. De los 11 rubros de evaluación que arroja el estudio, México apenas pudo superar la media en dos de ellos: Bienestar subjetivo y compromiso cívico y gobernanza. En el resto, su puntuación estuvo por debajo del promedio. En el tema del empleo y bienestar, existe un dato que desde 2010 ha mostrado uno de los rostros de la realidad mexicana en cuanto a su calidad de vida: en ese año, el 19% de los hogares que contaba con al menos uno de sus integrantes, se encontraba en situación de pobreza, mientras que en aquellos hogares en donde todos los adultos de la familia trabajaban, llegaba a niveles del 11%. Estos resultados, junto a los de Turquía y Japón, son los más elevados del organismo multilateral.
Lo anterior demuestra cómo, ante la falta de elementos internos para un desarrollo en la calidad de vida mexicana, el tejido social se ha descompuesto al grado de estar viviendo niveles de inseguridad preocupantes. La baja permanencia en las escuelas obliga a conseguir empleos poco remunerados y que paradójicamente tienen los mayores niveles de horas-semana. Estos dos factores, que sin duda no son los únicos, han contribuido a generar inseguridad en el país. Mientras no se atiendan los problemas sociales, no haya mejora en la política educativa y los empleos alcancen niveles de remuneración proporcionales, que no nos extrañe ver lo que hoy los medios informativos están comunicando al mundo.
El tintero.
El Comité de Derechos Humanos de la ONU anunció que este 15 de octubre determinará si hubo o no responsabilidad de las autoridades involucradas en el caso de la detención de la periodista Lydia Cacho. Luego de 9 años de haber ocurrido el suceso, la ONU se pronunciará sobre el góber precioso y de su presunta responsabilidad. Habrá que esperar que resuelvan luego de casi una década de los hechos.
Hace un par de días se dio a conocer un ejemplo de corrupción que se da al interior de los sindicatos académicos. Uno de los planteles del CONALEP, ubicados en la capital del estado de Quintana Roo se ha visto involucrado en un escándalo puesto que su entonces Director del plantel evidenció que hay 16 trabajadores (9 docentes y 7 administrativos) que no laboran en la institución ni prestan servicio alguno, pero cobran puntualmente su salario y prestaciones. Todo ello cuesta al erario poco más de 3.5 millones de pesos al año. La información señala también que el líder sindical –que está en el cargo desde 2008- junto con dos colaboradores cercanos, tienen cada uno plaza de 40 horas, mientras que sus compañeros de sindicato poseen 20 horas. Esto es solo la punta del iceberg, no imagino cuando se entre a fondo. Para quien desee conocer más del tema, recomiendo leer: http://www.periodistasquintanaroo.com/principales/destapa-morcillo-cloaca-en-el-conalep/
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