Por Arturo Ríos Ruiz

* El periodista nada dice hasta hoy

* Sería un buen agarrón en el final

López Obrador invitó a Carlos Loret de Mola a asistir a su mañanera para presentar pruebas sobre el reportaje de contratos al amigo de su hijo «Andy» López Beltrán. La reportera Reyna Haydee Ramírez cuestionó a AMLO sobre la metodología que usa para validar o desacreditar reportajes. Nota, en El Universal.

Si asistiera Loret, tendríamos un buen festín de información a nivel nacional e internacional. Saldrían chispas en gran cantidad y seguramente la respuesta del informador se conocerá.

Loret de Mola, es uno de los periodistas que con mayor constancia ha señalado de acuerdo a su óptica, los desmanes del presidente, sus hijos, otros familiares y sus allegados en el gabinete presidencial.

El mandatario exige pruebas, las cuales han sido públicas, ha habido grabaciones, videos y lo necesario para armar una información de contundencia fatal para el aludido. Él, el que manda, a todo dice no y se queda en que es mentira y nada más.

En la conferencia mañanera, un miércoles, en Palacio Nacional, López Obrador aseguró que “sencillamente no hay ninguna prueba” sobre la investigación de Loret de Mola de los contratos del gobierno de Quintana Roo dados a un amigo de su hijo “Andy” López Beltrán. El audio el que se apoyó el informador fue viral.

El mandatario, siempre tajante con un no, “tengo otros datos”, intenta desviar señalamientos con habilidad, enreda las respuestas, no deja hablar hasta callar al participante y así se la lleva sin importar que se ve mal.

Pero como es su costumbre, el mandamás, reveló que Carlos Loret de Mola vive en una popular calle de Polanco, en la CDMX, luego de que lanzó una vez más el reto hacia el periodista para intercambiar sus bienes. Así lo ha hecho contra todo informador que osa señalarle sus constantes desavenencias.

Así lo ha repetido con Amparo Casar; todos se las pagan, Ciro Gómez Leyva, Raymundo Rivapalacio, Joaquín López Dóriga y otros más. Al iniciar, publicó una larga de periodistas que no lo apoyaron, según él, en su campaña presidencial.

Ha desarrollado un régimen de desagravios, ha relucido su espíritu, como si se hubiera esperado llegar a Palacio para consumar el desquite que a toda luz se ha dejado ver. Así, ha sido su manera de desgobernar.

El tiempo final ya llegó, pero no ha dejado de pelear, ha declarado que se va a retirar, pero nadie cree, basta con la designación de Claudia Sheimbaun, cuya campaña ya la apegó y lo ha declarado en discursos masivos que continuará con la descomposición del país.

Por ello hay una campaña de los que rechazan la intención de cambiar la Democracia por un país sojuzgado, invitar al voto masivo, cuya esperanza del sector más golpeado con todo rencor, que es la Clase Media.

Debemos ser sinceros, carecemos de una buena oposición, los partidos tradicionales PAN-PRI-PRD, no son garantía, salvo el albiazul, los demás carecen de estabilidad y confianza. Nada sencillo está el futuro del país.

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