“Terrorismo: Dominación por el terror. Sucesión de actos de violencia ejecutados para infundir terror. Actuación criminal de bandas organizadas, que, reiteradamente y por lo común de modo indiscriminado, pretende crear alarma social con fines políticos”, fuente Real Academia Española; “terrorismo: Uso del terror y la violencia para logara algo. Actos criminales ejecutados por una organización que pretende causar terror y alarma social”, fuente Academia Mexicana de la Lengua.

No cabe duda alguna con respecto a su definición y lo sucedido en Francia justificación perfecta para iniciar lo que ahora se le definiendo como la Tercera Guerra Mundial.

Las redes sociales como instrumento de inconformidad y repudio de quienes participaban sobre el tema, así como la solidaridad de muchos siendo más popular el Facebook en donde cada quién subía una imagen con rostro de tristeza en algunos y en otros sin expresión, pero en el fondo anteponiendo los colores de la bandera de Francia.

Aunque no faltó la despistada o despistado dependiendo del caso que ni enterado se dieron pensando que se trataba de alguna nueva moda porque así funcionan las redes sociales como cosa viral y luego preguntan.

En medio de la confusión sobre el atentado algunos medios aseguraban siete muertos otros ocho, pero no faltaron los títulos de las noticias sensacionalistas, tragedia y luto. Tampoco faltaron tantos presidentes de algunas naciones así como representantes de entidades, incluyendo nuestro país lamentando, condenando y evidentemente dando las condolencias.

Retomando la definición de terrorismo y haciendo memoria o retomando la evolución del hombre como especie significa que somos una especie que de una u otra manera siempre ha iniciado el terrorismo para imponer ideales y políticas para la sobrevivencia de la mayoría de un grupo y todas aquellas revoluciones, colonizaciones, conquistas, batallas, guerras sin olvidar la primera y la segunda guerras mundiales todas iniciaron con algún acto de terrorismo para después encontrarle una justificación o motivo de causa en donde varían los temas siendo más común las de causa política, territorial, independencia y la más absurda de todas a nombre de Dios como fueron Las Cruzadas y las de Alá en donde ambas se mataron y a la fecha en el saldo figuran muchos inocentes, resultando incongruente que un ser supremo sin importar el nombre que le digan, creador del universo y la vida a la vez, sea una deidad que justifique a su nombre la destrucción de su propia y la mejor creación: el hombre

Pero cuando el fin justifica los medios ahí todos se pintan solitos sobrando las justificaciones. ¿Acaso se justifica la muerte cualquier hombre, mujer o niño? ¿Cuánto vale la vida de un ser humano? No existe una respuesta válida ante éstos cuestionamientos como tampoco el escoger un lado o un bando, al igual el decir, ellos comenzaron primero.

Estos movimientos sociales en las redes sociales así como dentro de nuestras comunidades de sentimentalismos y repudio, son tan hipócritas viniendo principalmente por los mexicanos así como de las mismas autoridades y poniéndolos desde una perspectiva no válida porque la vida de cualquier persona no se le puede poner un valor especial, pero si como punto de referencia, cuántos mexicanos se han preguntado o han visto un granito de solidaridad por parte de los franceses o cualquier otra nación por la muerte de miles de muertos en nuestro país desde el inicio del gobierno federal del sexenio de Felipe Calderón Hinojosa, el enfrentar al crimen organizado por la vía de las armas y ahora al frente de la actual presidencia de la república con Enrique Peña Nieto, en donde las muertes continúan y que tan solo como referencia en febrero del 2013 el Secretario de Gobierno, Miguel Ángel Osorio Chong, reconoció 70 mil muertos en la administración pasada solo falta sumarle del 1 de diciembre del 2012 al 31 de julio de 2015 un total de 57, 410 muertos relacionados bajo la misma bandera y causa. Eso a lo que se tiene registrado aunque no existe una cifra exacta puesto que hay muchos desaparecidos no contabilizados que tan solo en 8 años desde el inicio de la guerra contra las drogas en nuestro país comparativamente equivale a 10 años de guerra en Vietnam.

¿Alguien ha dicho algo? Quién se ha solidarizado ante los muertos y desaparecidos como lo han hecho con los siete u ocho muertos en Francia o lo mismo con ciudadanos de Siria bombardeados dizque estratégicamente resultando daños “colaterales”.

Entendible la preocupación y recomendación de los estadounidenses en pedirle a México fortalecimiento en el ingreso de gente que proviene de Siria y ridículo las declaraciones por parte de nuestras autoridades en donde se están llevando a cabo operativos de inteligencia para que no sucedan actos terroríficos en nuestro país, cuando ni siquiera ha podido controlar la violencia, crímenes y terrorismo en esta lucha contra el narcotráfico y crimen organizado fuera de control en donde los números se esconden al igual que los resultados fracasados en donde todos los mexicanos o al menos más de la mitad de nosotros sabemos que es una lucha en donde los malos han ganado aunque preocupados en exprimir los dineros que entran a las arcas del gobierno por medio de nuestros impuestos. Esos son los verdaderos terrorismos en México. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org