Hay tantos y tantos

Por Guillermo Robles Ramírez

Constantemente escuchamos en los medios electrónicos o leemos en los escritos, los lloriqueos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, de la necesidad urgente de contar con más ingresos y como única solución expone la creación de nuevos impuestos o incrementar el porcentaje de los actuales.

Y mientras Hacienda llora, los evasores de impuestos siguen haciendo de las suyas porque saben y están conscientes de que Hacienda se dedica solo a cobrarles a los cautivos, es decir, ya tiene sus clientes seguros y no tiene por qué preocuparse en buscar nuevos clientes.

A saber, entre muchísimos giros comerciales que no pagan impuestos están los moteles llamados de paso, pues es infantil que haya quién pida factura, así es que de 100 que caigan simulan cuatro o cinco facturas. Igualmente, pasa con los estacionamientos públicos, gimnasios, lotes de vehículos usados, las famosas pulgas, mercados sobre ruedas, table dance, rodeos, entre otros y que, si llegasen a estar registrados, pagan una miseria de contribuciones.

Independientemente de los giros mencionados, hay restaurantes que tienen años y años trabajando y a los clientes que les piden factura, les responden mil pretextos y así han pasado no meses, sino años completos. No estamos hablando de negocios ocultos o en sectores desconocidos, nos referimos a comercios ubicados en el primer cuadro de las ciudades y en colonias conocidas.

Por esas y otras razones, siempre hemos sostenido que Hacienda llora porque quiere porque hay tantos y tantos evasores, que honestamente no hay razón para crear nuevas tasas impositivas, ni tampoco incrementar los porcentajes de los ya existentes.

Este planteamiento no es nuevo, pues en repetidas ocasiones lo han planteado las cámaras empresariales y otros organismos que se quejan de que la carga burocrática y las obras públicas sociales se carga a un solo grupo que es el de causantes cautivos.

Hacienda reconoce que menos del 50 por ciento del sector productivo paga impuestos. El resto no la hace, pero tampoco se le exige, lo haga, así es que las cosas siguen en el mismo estado que han guardado por años y años.

El día que en México la carga burocrática se cargue a más causantes, cambiarán radicalmente las cosas y habrá un cambio real para todos. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org

Deja un comentario