Guillermo Robles Ramírez

En espera de salir de las cenizas como ave Fénix

Por Guillermo Robles Ramírez

            Este fin de semana pasada el Alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas y junto con cientos de saltillenses conmemoraron el 62 aniversario del Mercado Juárez, pero de su tercera construcción en 1957. Y muy atinadas sus palabras de agradecimiento para las familias que han mantenido con mucho trabajo un icono de la ciudad con su venta de mercancías artesanales y gastronomía muy sabor al pueblo mexicano.

            Pero el Mercado Juárez es más viejo que eso, ya que su primera construcción fue hace 117 años atrás en 1902. Un icono de la ciudad que habla por sí solo todo lo que ha pasado en todo ese tiempo y sobre todo lo difícil que ha sido el sobreponerse con el paso de los años, así como sus tragedias siendo su primera en 1925 cuando sufrió un incendio consumiéndose parcialmente.

            Posterior a ese sufrió otro más pero el que fue devastador convirtiéndose en cenizas fue en 1952. Después de cinco años de reconstrucción y por tercera vez en 1957 quedó terminado el Mercado Juárez, pero los locatarios que luego del incendio habían colocado carpas en la calle de Padre Flores y un año después fueron obligados los comerciantes a instalarse al nuevo Mercado Juárez.

            Aunque cada administrador del Mercado Juárez, trabaja cada día por mejorar este inmueble que tiene 65 locales en la planta baja y 90 en el alta, la lucha no ha sido nada fácil y la falta de cooperación e interés en cada administración va siendo menos por parte de autoridades municipales y estatales.

            Solo ha servido para muchos funcionarios y exgobernadores como el más reciente que solo iban a visitarlos para llamar la atención de los medios y fingir un “baño de pueblo” como símbolo de humildad para después marcharse a comer a los lujosos restaurantes.

            Su última manita de gato por parte de una autoridad, fue en el período de gobierno estatal de Enrique Martínez y Martínez, que fue del 1999 al 2005, se hizo una inversión de 12 millones de pesos para remodelar el Mercado que, en la época de lluvia, llovía más adentro que afuera.

            La remodelación se concluyó el día 31 de diciembre del 2002 y de ello hay constancia en una placa ubicada en la parte frontal de ese centro de abastos. En esa remodelación se colocó un techo nuevo y se dotó vitropiso a todas las áreas y se les dio un toque de lo más moderno de la fachada.

            Por las noches, una manada de gatos se encarga de combatir a los roedores, pero no es lo único que tienen que combatir en el Mercado Juárez, además del interés de los grandes centros comerciales, sino también la instalación de vendedores foráneos que en esta temporada navideña se posesionan de las proximidades del Mercado Juárez, Plaza Francisco I. Madero y San Francisco en donde vienen a hacer su “agosto” en pleno diciembre con las ventas de luces y adornos navideños.

            El Mercado Juárez de Saltillo, está en una constante lucha para mantenerse abierto y sostenerse ante la competencia de los depredadores más feroces que son las plazas comerciales modernos, así como aquellas cadenas familiares de tiendas de conveniencia que hay en cada colonia de la ciudad sin importar si se trata de alguna humilde pero siempre hay una.

            Saltillo, “El Atenas de México”, representado por el nogal como símbolo de nuestra entidad; y el vetusto edificio con más de medio siglo de vida, para la desorbitada población de más de un millón de habitantes, es considerado por miles de saltillenses como obsoleto y no se puede predecir cuál funcionario lo haga surgir de las cenizas como el ave fénix. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018) www.intersip.org

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