Por Guillermo Robles Ramírez

México como país, pero también muchos Estados de la República, han tenido gobernantes que han realizado el sueño de su vida, aunque preferentemente han sido caprichos, que igual podríamos calificarlos de gustos o excentricidades, sin que hayan tenido que ver con beneficiar al pueblo, a la comunidad, a sus gobernados.

Esas conductas, mucho o algo, contradicen y chocan con lo que hablan y dicen en sus discursos. Por ejemplo, Luis Echeverría Álvarez, que fue Presidente allá por los años 70’s, mostró públicamente, o al menos en sus giras, una imagen sencilla, pregonando y prometiendo todo el tiempo hacer algo por los campesinos, lo que nunca se vio, pero sí, en cambio, se dio el gusto de cenar en cierta ocasión y con motivo del 24 de diciembre con los campesinos del desierto de Coahuila.

Se dio su gusto, a los contribuyentes nos costó una buena lana y no por la cena porque hasta eso se dio comida campirana entre ella, tamales, atole, champurrado y tacos de frijoles.

Y, lo gravoso, no fue toda la comitiva que acompañó a Luis Echeverría Álvarez, ni los contingentes de campesinos que se movilizaron, sino la espectacular pista de aterrizaje que se construyó precisamente en Sierra Mojada, cerca al lugar que se preparó para la cena con “nuestros hermanos los campesinos”.

Trazos de la pista todavía existen, aunque el Presidente la usó solo en una ocasión, mientras que los narcos y grandes fayuqueros, sabrá Dios cuántas veces.

A José López Portillo, le dio por pagarles a sus hijos y esposa, doña Carmen, viajes a Europa. Hasta una de sus hijas, Paulina, fue patrocinada y alentada por su papá para ser cantante. Y, claro, todo con nuestros benditos impuestos. Doña Carmen Romano, le gustaba tocar el piano y éste era llevado a las giras por el país y en el hotel donde se hospedaba, la cama de doña Carmen tenía que tener un desnivel de 40 a 50 centímetros entre la cabecera y piecera

Llegó Carlos Salinas de Gortari y se hizo la famosa pista de aterrizaje en Agualeguas, Nuevo León, que se utilizaba dos o tres veces al año, preferentemente en Semana Santa porque iba a descansar y a correr con los vecinos y familiares de Agualeguas y visitar su rancho el “Guajolote”. La pista actualmente está llena de hoyancos y enormes piedras, sin que se ocurra ningún otro uso.

Con Vicente Fox, la Biblioteca Vasconcelos terminó en abandono por su gran problema de goteras que ponía en peligro todo el material de lectura y así se puede enumerar cada uno de los caprichos que ha tenido el Presidente de México en turno.

Pero sumando el de los exmandatarios de nuestro país, sin duda alguna el que lleva la cabecera será el actual Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, como ha sido el capricho de la construcción del Tren Maya en la que se quedará a medias, puesto que carece de una inviabilidad comercialmente turística, el nuevo Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, carente de las normativas aeroportuarias motivo por el cual aerolíneas internacionales no quieren hacer uso de ella, el rechazo del uso del Avión Presidencial mexicano para demostrar austeridad, sin embargo, el gobierno de AMLO, sigue pagando su mantenimiento que hasta donde se sabe el año pasado fueron mucho más de 400 millones de pesos, y más de 280 millones de pesos para la organización de su rifa, pero a la fecha ni rifado, y menos vendido, pero el gobierno de Morena sigue pagando.   (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org