*Soberano Molesto
*Cónsul Mentiroso
*Traumas Histórico

La furia social y, en ocasiones, la represión que genera en los gobiernos insensibles, suelen ser elementos definitorios contra las tiranías y los farsantes disfrazados de demócratas. Recuérdese, en enero de 1905, el “Domingo Sangriento” en San Petesburgo que marcó la caída en espiral del Zar Nicolás II y el destino funesto para él y toda su familia; o, más recientemente, la matanza de Tian’anmen, en Beijing, el 4 de junio de 1989, el año en ek que también fueron derribados el Muro de Berlín y comenzó la desintegración de la Unión Soviética. Debe marcarse este tiempo como uno de los de mayores cambios en la historia de la humanidad aun cuando persistan quienes pretendan retornar por la misma senda desafiando al mundo. ¡Si en México lo logró el PRI!
Por experiencia puedo adelantar dos ejercicios de prospectiva:
1.- El presidente peña nieto será recordado, sí, por su actuación alrededor del desmantelamiento de PEMEX, esto es por la reforma energética ya promulgada en todas sus líneas con sanciones establecidas contra los mexicanos, pero no para bien. Una vez que deje el confort de la residencia blindada de Los Pinos, perderá la historia. No me queda la menor duda, además, de que las mentiras, tales como la prometida baja en los precios del gas y las gasolinas –ahora se habla de que los efectos de los cambios tardan para matizar lo primero-, le convertirán en uno de los mandatarios más empobrecedores de toda la crónica patria, equiparable sólo con quienes vendieron, miserablemente, parte de nuestro territorio, específicamente Antonio López de Santa Anna.
2.- El señor peña nieto tendrá cincuenta y dos años cuando deje la silla presidencial, de manera irreversible, en 2018, si es que la enfermedad cada vez más visible en él no se interpone antes. Difícilmente terminará con ello su vida productiva e intentará, como antes lo hicieron ernesto zedillo y felipe calderón, ocupar un lugar en alguna de las organizaciones o empresas multinacionales más favorecidas por sus decisiones durante su gestión presidencial. No debe temer por sus vidas, esto es como consecuencia de alguna vendetta por parte de las mafias, porque éstas, al fin, no han sido dañadas estructuralmente y, al contrario, pueden decir que han sido beneficiadas por la tibieza gubernamental a pesar de los saldos sangrientos conocidos.
No habrá reconocimientos a futuro; tampoco persecución judicial. Es como si se tratara de una costumbre que valida y reafirma el hecho de que los ex presidentes de México, cualquiera que sea su filiación, son intocables bajo una sentencia: si se les toca, el sistema político mexicano podría temblar. Pero tal, para este columnista, es una monumental falacia. Se ha demostrado, plenamente, que en las naciones en donde la justicia llega hasta los jefes de Estado en ejercicio o los ex mandatarios, la estructura oficial, se fortifica y los gobernados aplauden y alientan a sus representantes liberándolos de las cadenas de las sospechas, tan dañinas en una verdadera democracia; no así cuando el aparato de control oficial es capaz de manipular hasta las estadísticas de la pobreza como ya lo hicieron los fox.
Por eso, claro, peña nieto puede respirar tranquilo; por cuanto al “lunes negro” de la semana pasada –11 de agosto-, y las repercusiones de esta decisión que nos devuelven a los escenarios anteriores a uno de los momentos más gloriosos de la vida institucional del país: la expropiación petrolera que se cristalizó más allá de los múltiples intentos de sobornos con los cuales se intentó mancillas, como otras veces, el honor de la República. Cuando en las altas esferas, un gobernador o algún presidente aceptan una “comisión”, en ese preciso instante se pierde la dignidad nacional y comienza la deshonra que puede extenderse por años.
Y les doy un ejemplo reciente: el del Grupo México, cuyo principal accionista es el criminal de cuelo blanco Germán Larrea Mota-Velasco, causante de la tragedia de Pasta de Conchos, en febrero de 2006, y que ahora presume de haber adquirido Ferromex con todo y sus “vagones de la salud”, una verdadera cortina de humo mientras los mineros bajo el sello de este corporativo siguen viviendo en condiciones infrahumanas. Y como los homicidas siempre reinciden, ahora el mismo “grupo” es acusado por verter ácido sulfúrico sobre el río Sonora en cuyo lecho se han detectado fuertes cantidades de arsénico, cadmio y otros metales infecciosos. ¿De qué otra manera podría ser si los ejecutivos de esta empresa rebosante de tentáculos es una de las de mayor impacto entre las fuentes gubernamentales y su socio principal se sitúa ya como el poseedor de la mayor fortuna del país con haberes de 14 mil 700 millones de dólares?
Y éste personaje, Larrea –me gustaría agregarle la sílaba “di” suprimiendo la “ele”-, es uno de quienes hacen fila para alcanzar el privilegio de los inminentes “contratos” de PEMEX, lo mismo como titular de su empresa que como prestanombre de algunas multinacionales ávidas de sustraer todo nuestro oro negro hasta la extinción de nuestras cuantiosas reservas. Con ello, naturalmente, los Estados Unidos, amén de cuanto ha dispuesto en el Medio Oriente a golpes de bombazos, podrán controlar al mundo asimilando el petróleo universal.
Por ello no es de extrañar, siguiendo la secuela dramática, que Venezuela, por decisión del “patriota” Nicolás Maduro Moro, haya decidido vender su red petrolera a los Estados Unidos. Con esta situación se confirma lo que ya sospechábamos: desde la era chavista los arreglos soterrados posibilitaban el intercambio de descalificaciones pero sin poner en riesgo los acuerdos soterrados bilaterales; por ello el extinto “comandante” golpeaba verbalmente a la Casa Blanca y sus cachorros –así llamó a vicente fox-, pero procedía políticamente contra los intereses de la Unión Europea, en concreto España, estatizando sus empresas. La autocracia implica también extender las cortinas de humo para alejar la verdad de los pueblos manipulados.
Sería razonable solicitar a los operadores de Los Pinos, tan soberbios siempre, que repasaran los antecedentes y entendieran, de una vez por todas, que podrán imponer medidas contrarias a la fe del pueblo a sabiendas de perder el peso histórico y ser irremisiblemente condenados aun cuando no pisen, no digamos una celda, sino un tribunal dispuesto, de verdad, a ejercer justicia sin líneas superiores. Lo terrible es la opresión de conciencia que llega, temprano o tarde, hasta la languidez que es presagio de finiquito. Los mandatarios mexicanos mueren bajo el agobio de mil interrogantes o, como luis echeverría, viven de más, hasta corroerse por dentro con su mutismo y su incapacidad por defenderse seriamente de las peores acusaciones: la de genocida, nada menos si bien el “sistema” le facultó su salida para no ensuciar, alegaron quienes cuidan a los mexicanos como si fuéramos párvulos, a la institución presidncial. Todo muy conveniente.
Por ahora me indigna otra de las monumentales falacias. El señor peña nieto, exultante al sentirse rodeado de sus incondicionales quienes aplaudían sin cesar –incluyendo a los dirigentes del PRI y el PAN-, no tuvo rubor alguno al proclamar respecto a la reforma energética: “se trata de un gran logro de la democracia mexicana”. Desde este momento, el señor peña tiene la obligación de explicar a sus gobernados cuál es la nueva acepción del término porque, desde luego, la teoría clásica –gobierno del y para el pueblo- ha sido totalmente rebasada y no sólo eso, observada precisamente en sentido contrario a la esencia original. No cabe la menor duda al respecto. ¿O acaso, de verdad, la mayor parte de los mexicanos está a favor del paso que “nos hará crecer” con las minucias de los foráneos?
Ya es vergonzoso el lugar común que se arrogan los líderes y representantes de cada corriente política al considerar que hablan por “todos” los mexicanos. En lo particular, me niego a ser incluido en esta generalización mentirosa. Insisto: este columnista no está en pro de la reforma peñista porque reduce, a futuro, nuestras reales expectativas de riqueza. No es cualquier cosa. Y así piensan, fíjense nada más, casi todos los interlocutores, incluso algunos priístas, con quienes he dialogado sobre el tema. No crecimos y si nos movemos es para atrás, como los cangrejos. Pido perdón, como mexicano que soy y perteneciente a esta generación mancillada, al inmenso general Lázaro Cárdenas del Río.
Debate
Claro, sin apego a la razón y sin defensa de nuestra soberanía, la diplomacia mexicana sólo tiene el recurso de mentir y evadirse de sus responsabilidades. Como ya he contado –“Despeñadero”, 2013-, necesité el apoyo consular, en Madrid, el 26 de noviembre de 2012. Y no me fue otorgado aunque se me afrentaba por una infamia fruto de la esquizofrenia y la deslealtad -¡cuántas traiciones nos acechan!-. Y ahora recibo una respuesta a la queja interpuesta ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos el 4 de febrero de este año dentro del expediente CNDH/5/2014/692/Q, con relación al falaz e ilegal comportamiento del funcionario Álvaro Castro Espinosa, adjunto al Consulado mexicano en España. 
En el documento, se pretende desmentir mi acusación sobre dos bases insostenibles:
1.- Que mi abogado, Luis Sánchez-Alarcos, recibió notificación de que se había dictado mi libertad provisional –estuve detenido, y aislado, durante veintiséis horas, sin más razón que una denuncia histérica, o como intuyo, por efecto de un acuerdo para castigar a quien había revelado el alcoholismo del pobre calderón, actuando contra mí precisamente en la última semana del sexenio de la violencia-, y por tanto se consideró innecesario el auxilio consular. Falso. El abogado NO podía saber tal cosa porque a la hora de su visita a la embajada mexicana NO se había realizado la vista correspondiente y, por ende, no se había decretado mi libertad, sin fianza ni restricción alguna. Después volverían a juzgarme, en ausencia, sin considerar que ya había viajado a México y exigí la protección jurídica de nuestros tribunales. Hasta hoy.
2.- El funcionario de marras, Castro Espinosa, negó haber solicitado los servicios de una empresa privada, Eliminalia “Borramos tu Pasado”, para que fuera condenado por las leyes españoles sobre un artículo publicado sobre el particular. Una aberración. Ahora él alega que no fue él quien usó este servicio cuando en la columna señalada se habló de él, de su nacionalidad y cargo, por lo cual un homónimo no podría ponerse el saco. Lo terrible es que se demostró que el uso de la libre expresión en España es tan vulnerable como el guardameta del Osasuna. 
Por supuesto, procederé al respecto.
La Anécdota
Los abogados españoles que consideraron llevar mi caso supusieron que, en todo momento, era yo una especie de rehén de los juzgados españoles para cuando éstos decidieran cómo proceder contra mí aunque se tratara de infundios tales como supuestas amenazas, vertidas en todo caso desde nuestro territorio nacional. Fue por eso que el abogado mexicano, Isidro Castorena, les respondió con dureza:
–Les recordamos que, para bien nuestro, México es una nación soberana desde hace doscientos años…
Esto es, cuando corrimos a los colonos españoles a patadas después de todo el daño infringido a nuestra tierra. Bien vale recordarlo.
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Web: Próxima a reanudarse.
E-Mail: loretdemola.rafael@yahoo.com
SOMOS MÁS POBRES PORQUE YA NO SOMOS DUEÑOS DE NUESTRO SUBSUELO AUNQUE EL GOBIERNO SIEMPRE SE LO APROPIÓ PARA SÍ. Y, PARA COLMO, SIEMPRE ESTAMOS DISPUESTOS A BAJAR LA CABEZA EN LAS CONTROVERSIAS CON ESTADOS UNIDOS Y ESPAÑA, SOBRE TODO. NI DEMOCRACIA NI SOBERANÍA.