Por Guillermo Robles Ramírez

Hay algunos diputados locales coahuilenses que tienen la inquietud o sugerencia de hacer modificaciones a la Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del Estado de Coahuila; para tener más control en el crecimiento de nuestras ciudades, en especial la de la cabecera municipal de Saltillo, que en los últimos años ha tenido un crecimiento desbordado en un tremendo e inusual desarrollo que preocupa a propios y extraños.

Una ley que se publicó en diciembre del 2017, y su última reforma fue publicada en el Periódico Oficial el 23 de febrero de 2021, así que personalmente no la considero que esté obsoleta, aunque también no hay nada oficial por parte del Congreso del Estado de Coahuila, en cuanto a nuevas iniciativas sobre el mismo tema.

La preocupación del crecimiento de las diferentes cabeceras municipales, siempre será una situación alarmante, algo que es muy cierto. Ahora bien, en mi opinión, considero que este tema no se trata de hacer más reformas sobre la misma Ley de Asentamientos Humanos, Ordenamiento Territorial y Desarrollo Urbano del Estado de Coahuila, o mucho menos el hacer una nueva.

Difiero totalmente que sea un problema que se solucione con más leyes y/o reglamentos, sino lo único que falta es que se respeten y cumplan las disposiciones que contiene la actual ley y normas.

Hay que conocer algo más que los baladíes temas pretendan tocar en alguna sesión del Congreso, y mucho menos que algún diputado o diputada local lo quiera hacer pública, como también cualquier sugerencia que mejor estén informados y enterados de lo que tenemos.

La ley de planificación de Coahuila, si bien es cierto que requiere una constante adecuaciones por los tiempos modernos y necesidades, necesita más en este momento, que se le respete y que si se hiciera cumplir la ley actual; porque de esta manera, ni Saltillo o, ninguna otra ciudad estuviera amenazada con un crecimiento indiscriminado que puede arrastrar muchísimos problemas a un futuro inmediato.

Hay profesionistas en materia de planeación urbana consideran que con la que tenemos es más que suficiente para crecer correctamente, siempre y cuando se hicieran cumplir, sino todas las disposiciones de la ley, al menos las principales y más importantes.

Actualmente, contra lo que marcha a la ley de planificación, de hecho, en todos los municipios se permite construir lo mismo en terrenos cercanos a gaseras que, en las orillas de nuestros ríos y arroyos, que las faldas o partes más altas de nuestras sierras y montes, sin tan siquiera cuidar que el terreno sea el apropiado e indicado.

Los permisos de construcción se autorizan al mejor postor, haya o no la infraestructura indispensable, se cumpla o no con lo mínimo, como contar con los servicios más elementales que es el agua, drenaje, luz y pavimentación. Es más, existen dizque colonias y fraccionamientos que después de cinco y hasta diez años, siguen sin contar cuando menos con agua y drenaje. Entonces, para qué en hacer más modificaciones o actualizaciones si con la actual tenemos, pero, ¡eso sí!, aplicándola y sancionando a quien la viole. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México).  www.intersip.org