Como si los tuvieran secuestrados
En ésta vida todo tiene un ciclo, que para quienes son negativos confunden esto con la monotonía llegando a la aburrición; otros se ofenden por ser comparados al reino animal salvaje y doméstico en donde no le ven el chiste a la vida y solo tienen ojos para el ciclo de la vida como el nacer, crecer, comer, defecar y morir.
Resumido suena muy fácil, pero tanto en la fauna como en la vida del ser humano por más simple que sea tiene su complejidad y uno de los tantos procesos en repetición que tenemos como personas es la enseñanza a nuestros hijos, en donde una gran parte depende dentro de los hogares y su complemento son en las instituciones educativas ya sea de gobierno o particulares.
Para quienes vivimos en zonas urbanas más grandes, las mil ocupaciones y el trabajo hacen que la mayoría de las personas no vean las instituciones educativas como lo que son; sino como guarderías para sus hijos para que la mamá o el papá puedan ir a trabajar. Hay quienes se quedan haciendo los quehaceres de la casa en donde tienen contadas las horas y los minutos para limpiar, lavar y hacer la comida antes de ir por los hijos para que cuando lleguen los pequeños peloncitos y el viejo del marido, esté la comida recién hecha y calientita.
Así de ésta manera muchos padres de familia ven la bendición de las escuelas, un lugar que sirve para que los hijos pasen el tiempo sin que estorben para hacer sus ocupaciones y obligaciones sin ninguna distracción dentro de los hogares.
Pero qué sucedió con los nuevos calendarios escolares en donde nuestra autoridad educativa hizo cambios para dizque un mejor aprovechamiento en la educación y calidad extendiendo los días de estudios en donde el último viernes de cada mes los alumnos no fueran a la escuela para que toda la población docente tuviera sus cursos de capacitación y planeación para el siguiente mes, en donde en lo personal el viernes pasado fui testigo de la existencia de éstos programas ya que mi incredulidad me llegó a pensar que era falso que fueran los maestros a esos cursos y que se la pasaban pachangosamente entre la botana, la comedera, el chisme o simplemente no iban, pero contrario a todos esos prejuicios constaté que sí los tienen encerrados en esas juntas y difícilmente los dejan salir.
Esos viernes dedicados para el personal docente han dado frutos que gracias a ellola SEPpropuso, pero ahora los maestros disponen de ese tiempo porque terminaron antes de lo señalado previamente, las temáticas de cada una de sus materias en donde nada más por cumplir con las nuevas disposiciones escolares de respetar un calendario ya tiene desde ésta semana que a los estudiantes los tienen sentados malhumorados al igual que los maestros porque ya no tienen material para ponerlos a enseñar porque inclusive ya fueron evaluados con sus últimos exámenes para pasar al siguiente año y todos están como cualquier prisionero a punto de cumplir una condena contando los días para poder salir sin otra cosa que hacer porque de acuerdo al calendario escolar 2013-2014 hasta el día 15 de julio es la fecha de entrega de documentos para la acreditación y certificación de materias.
Así que por un lado las mamás y papás están contentos porque tienen más días de hacer, sin distracciones de hijos, sus actividades en donde cada vez que se acercan los días de fin de cursos ya están bajando a todos los santos para que se alarguen más para no tener que estar lidiando con ellos.
Por otro lado, los maestros cambiando de oficio a celadores de los prisioneros, es decir, los estudiantes para que no puedan salir de las aulas con pretextos de ir al baño, el querer hablar a la dirección o buscar cualquier otra excusa para irse de “pinta” mientras se llega la hora de la salida y al verse frustrados ante ello nada más llegan de genio a sus casa quejándose con sus papás de que el maestro nada más los tienen sentados sin hacer nada porque ya terminaron de ver todas las actividades de los libros de texto dela SEP.
Una vez más queda demostrada la ineptitud de quienes hacen las reformas que son gente con muchos títulos o sin ellos, pero lo que sí es cierto es que son personas que nada más lo hacen planeando, es decir, nunca han estado en el campo de batalla y no saben que en la práctica sus propuestas de escritorio valen más que pura chingada. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org
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