Guillermo Robles Ramírez

Se pierde terreno en el turismo

Por Guillermo Robles Ramírez

Si dentro de una familia existen pleitos o separaciones por discusiones de cualquier tipo, por qué no habría de pasar lo mismo con naciones que ni siquiera comparten la misma sangre.

En caso concreto entre Estados Unidos y Cuba en donde antes existía una buena relación y se acabó cuando Fidel Castro tomó el poder con un golpe de Estado y dentro de su estructura como nueva nación e ideales que no fueron convenientes para los EE.UU., provocando el bloqueo comercial a la isla caribeña por más de 60 años.

Pero el interés de controlar a la isla de Cuba, viene desde la época de Benjamín Franklin; cuando le hacía recomendación a Inglaterra para tomar la Isla de Cuba para extender el dominio de los Estados Unidos de América, manera directa o subordinada.

En su bloqueo político y turístico, pero sobre todo el comercial en donde como toda nación de primer mundo pretendió aislarlo del resto de las naciones aliadas de los EU, fue con la intención de someter a los cubanos.

Pasaron los años dando sorpresas al mundo en donde se demostró todo lo contrario y sacando lo mejor de los cubanos no solo como país sino también en lo individual.

Al día de hoy Cuba se reconoce a nivel mundial con profesionistas que compiten con los países de primer mundo, como es en la medicina en donde también la investigación de casos especiales se lleva a cabo en esa pequeña isla. Muchos médicos mexicanos van allá a prepararse por su alto reconocimiento.

En el 2014 el Banco Mundial publicó un informe sobre la problemática de la educación en América Latina y el Caribe en donde después de un análisis de los sistemas educativos y textualmente el Banco Mundial dice “ningún sistema escolar latinoamericano, con la excepción de Cuba”, tiene parámetros mundiales, es decir, no son compatibles.

Lo mismo sucede con la Escuela Nacional de Arte en donde es reconocida dentro de las mejores del mundo en donde imparten música, artes plásticas, artes dramáticas, ballet, danza moderna y folclórica, circo y espectáculos musicales.

Muy a pesar del cierre comercial implantado a Cuba en donde a excepción de nuestro país que siempre le ha tendido la mano sin causar fricciones con el gobierno norteamericano, la isla siempre ha despertado un interés turístico en donde la seguridad de quienes lo visitan es primero.

Y muy a pesar de que la prohibición por parte del gobierno estadounidense de visitar Cuba a excepción de políticos que no necesitan justificarse dentro de sus 12 categorías para el permiso de Estados Unidos de América para que sus ciudadanos viajen allá o ya sea también un intercambio cultural o religioso cada vez es más común observar artistas “gringos” allá y siempre el sector hotelero cubano con cupo lleno y en su mayor parte por ciudadanos estadounidenses que cada vez prefieren más ésta pequeña isla por su belleza y tranquilidad, pero sobre todo por su seguridad.

De poco sirve que se digan en discurso sobre el combate a la delincuencia organizada cuando los índices que nuestros políticos siempre argumentan que van hacia abajo siendo todo lo contrario de lo que opinan otras naciones como nuestro país vecino del norte que no se cansan de mandar alertas a sus ciudadanos de no visitar México por el crimen organizado.

Si bien es cierto que el narcotráfico está en todo el mundo incluyendo los EE.UU. como principal cliente de consumo y también en donde operan grandes capos de éste negocio que ha cobrado tantas vidas, también es cierto que allá con los “gringos” las mismas bandas criminales que hay en México tienen mejores acuerdos de “éticas”, reglas entre los diferentes grupos criminales y sobre todo respetan la leyes americanas porque a diferencia de nuestro país, allá si los atrapan y castigan con todo el peso de la ley en donde no se ven ejecuciones o muertes como en México porque sale más barato mandar matar a alguien en nuestro país que allá, es decir, levantan a su víctima por algún asunto de ajuste de cuentas cruzan a Tijuana o dependiendo de la frontera y los mandan matar en nuestro territorio mexicano para después exhibirlos.

La violencia del crimen organizado que ha permitido nuestro gobierno, no solo asusta a los mismos mexicanos sino también y con mayor razón a quienes quieren visitar nuestras playas prefiriendo buscar nuevos lugares y playas para descansar sin la preocupación de tener que vivir un episodio de violencia en donde peligre su vida en algún cruce de fuego. Ni siquiera la política del actual gobierno federal de “abrazos y no balazos”, no ha funcionado para bajar los indicadores sino todo lo contrario. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org

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