Pensamiento lateral: México y su arritmia económica
Cuida de los pequeños gastos; un pequeño agujero hunde un barco.
Benjamin Franklin (1706-1790) Estadista y científico estadounidense.
Cuando como ciudadano, uno lee o ve en las noticias información que está relacionada a lo que eroga el gobierno en vestuarios, viajes, alimentos y comunicación, pensará que somos un país con amplios recursos económicos que nos damos el lujo para patrocinar los gastos que hacen nuestros representantes populares en el país y el extranjero. Luego de enterarme de la comitiva de más de 200 personas que acompañaron al Ejecutivo Federal a su visita de Estado a Inglaterra, y del elevado costo del vestuario de su esposa e hijas de ésta, deduciría que la gran mayoría de quienes habitamos en este país nos alcanza para darnos, al menos, alguno de esos gustos personales.
Sin embargo, los datos duros, las estadísticas no oficiales y la investigación de instituciones serias me devuelven a la realidad y me comprueban que México es un país de amplios contrastes políticos, económicos y sociales. Que sus problemas de corrupción no tienen que ver con una cuestión cultural sino sistémica, de ausencia de valores democráticos y de una conciencia del respeto a la ley y a las personas.
¿Cómo podemos enfrenar la desigualdad en México si nos enteramos, por un lado, que el Presidente requiere de dos centenares de personas que le acompañen al otro lado del mundo, mientras que, por el otro, en nuestro país a 4 de cada 10 habitantes no le alcanza el salario para alimentar a los integrantes de su familia y, por ende, se ven obligados a recurrir al Estado benefactor (mediante programas sociales), remesas de familiares u otra vía que les permita darles de comer?
Y es que la situación, en lugar de disminuir, está aumentando. En 2005, el problema de la alimentación alcanzaba al 34.8% de la población, mientras que en la actualidad ha llegado al 42.9%, es decir, un 8.1% más que hace 10 años. De hecho, en el 10% de los hogares más pobres del país, 4 de cada 10 pesos que usan para alimentarse no proviene de un salario sino de otras fuentes (remesas, programas sociales, etc.).
En este mismo orden de ideas, Veracruz, Distrito Federal y Baja California son las entidades con mayor incremento y nivel –en consecuencia- de pobreza por ingresos laborales. Sólo en un año, estas entidades incrementaron sus niveles en 8.1%, 5.8% y 5%, respectivamente. Pero ahí no acaba. De acuerdo a información que proporciona el Semáforo Económico, a través del estudio México ¿cómo vamos?, se considera que México tiene la capacidad de crecer a un 6% y generar 1.2 millones de empleos al año. Pero, ¿por qué no se consigue esa meta? ¿Por qué, a pesar de tener altos ingresos vía turismo, petróleo y de contar con un comercio mundial diversificado, además de vastos recursos económicos, no llegamos a la meta?
Un primer factor que explica la situación es la arritmia económica en el crecimiento de las entidades. De acuerdo al estudio citado, dos terceras partes obtuvieron una calificación inferior a los 56 puntos de 100 que evalúa, mientras que apenas 8 entidades se encontraron entre 56 y 59 puntos. Únicamente 3 entidades lograron una puntuación superior a los 60 puntos: Guanajuato, Nuevo León y Jalisco.
EVALUACIÓN DE LAS ENTIDADES SEGÚN EL SEMÁFORO ECONÓMICO.
Fuente: http://imco.org.mx/banner_es/semaforos-economicos-estatales-via-mexico-como-vamos/
Esta información permite demostrar que el país avanza a distintos ritmos. Mientras que la mayor parte del activismo económico está concentrado –y aprovechado- en el norte del país (a razón de contar con la frontera y mayores beneficios vía TLCAN con Estados Unidos), el centro y el sur presentan indicadores por debajo de lo mínimo necesario. Sin embargo, hay entidades que demuestran tener, por ejemplo, niveles de crecimiento económico y hasta generación de empleos aceptables. Pero a nivel nacional, sencillamente el país no crece. ¿Por qué?
Considero que la poca o nula disciplina financiera que dan en el manejo de los recursos cada entidad –el que le llega vía participaciones más los recursos propios- es otro factor que demerita la sincronización para un homogéneo crecimiento nacional, puesto que entidades como Quintana Roo, Chihuahua y Coahuila, muestran tasas de crecimiento aceptables pero poseen altos endeudamientos públicos.
Un tercer elemento se debe a la mala distribución y, en consecuencia, al mal ejercicio de los recursos públicos. Las observaciones evidentes que ha hecho la Auditoría Superior de la Federación al Congreso de la Unión en el manejo poco transparente de los recursos, así como del gobierno federal y las entidades en diversos programas sociales y de infraestructura, habla de una grave fuga de dinero que, aparentemente, no tiene nombres ni apellidos en el deslinde de responsabilidades.
Finalmente, la poca atención que prestamos los ciudadanos al deficiente ejercicio de los recursos públicos que hace el gobierno, contribuye a aminorar el rendimiento del crecimiento económico. Claro está que este factor puede considerarse como indirecto pero mientras mayor presión tenga el gobierno de una ciudadanía más actuante, pendiente y exigente en el manejo transparente del erario, menos casos de desvíos y corrupción encontraremos en nuestro país. Hoy encontramos, por ejemplo, como algunos partidos políticos se hacen omisos ante la legislación electoral y despliegan amplias campañas de difusión para posicionarse. Ello habla del poco sentido de la legalidad que tienen estos institutos que son, en teoría, escuelas formadoras de cuadros políticos que serán los tomadores de decisiones del rumbo que tenga el país.
El tintero.
Finalmente el INE atendió la demanda de 7 partidos en sancionar al PVEM por actos anticipados de campaña y violentar la equidad en el proceso electoral. Los partidos opositores, principalmente el PAN y el PRD acusaron a los integrantes del Consejo General de estar al servicio del Ejecutivo Federal. No sé si sea cierto pero de lo que estoy seguro es que sus propias bancadas propusieron a 6 de los 11 integrantes de dicho órgano electoral. Usted deduzca lo demás.
Será interesante conocer los perfiles, ahora que ya se han dado a conocer, de cada uno de los que se postularán para las próximas elecciones federales intermedias, así como de algunas locales. Hay, por ejemplo, ex futbolistas, actrices y hasta payasos, y no se trata propiamente de un reallity show propiamente, sino de quienes se harán cargo de la interpretación y modificación de las leyes del país. Imagínese cuánto aportaría la Aventurera mayor al fortalecimiento de la democracia. Al igual que usted, me quedé en silencio.
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