LOS RETOS DEL PERIODISMO ACTUAL

 Porfirio Díaz decía de manera  irónica e hiriente refiriéndose a los periodistas e intelectuales que, perro con hueso en la boca ni muerde ni ladra. Esa expresión, cobra vigencia en el entorno contemporáneo pues refiere y  pinta de cuerpo completo a ese grupo de periodistas, comunicadores e intelectuales que durante varios sexenios, han sido beneficiarios de grandes sumas de dinero a cambio de su silencio ante las brutales acciones políticas o económicas implementadas por los gobiernos en turno.

Diversos hechos dan cuenta de esta terrible práctica que sin duda, ensombrece al periodismo nacional e internacional, pero sobre todo a la libertad de expresión.

Lejos quedan los ejemplos del periodismo digno que personificaron las brillantes plumas de Don José Joaquín Fernández de Lizardi o de Ricardo Flores Magón, por citar a algunos.

Las magistrales letras de Lizardi, vertidas en el pensador mexicano o de Ricardo Flores Magón en el histórico Regeneración deberían constituir un referente obligado a todos aquellos que eligen la brillante actividad del periodismo.

Es una desgracia que cierto periodismo haya sucumbido a las tentaciones de la corrupción y que como lo dijera en alguna ocasión Álvaro Obregón  no haya soportado un cañonazo de cincuenta mil pesos.

Por supuesto que el periodismo constituye por sí mismo una actividad sujeta a presiones constantes. De cara al poder ha tenido que ceder ante la disyuntiva del silencio o la fórmula clásica del autoritarismo que exige declinar a sus exigencias u optar por el encierro, destierro o el entierro.

Terrible panorama para un periodismo que busque ser crítico y pretenda ser consecuente con el derecho inalienable de la libertad de expresión.

Pero no todo periodismo ha enfrentado las presiones o sufrido el autoritarismo  para ser sumiso y complaciente con el o los gobiernos en sus diferentes niveles. Es ese periodismo que sin el menor recato y vergüenza, alquila sus pluma para decir lo que se le pida. A ese periodismo es al que de manera despectiva se le conoce como chayotero. ¿Pero, en realidad existe?

Los periodistas que has sido señalados como chayoteros han manifestado que la acusación es falsa. Cientos de páginas y horas de micrófono se han ocupado para tratar de desmentir la idea de que existe una prensa pagada. Pero a pesar de los esfuerzos, los indicios son absolutamente inocultables. El 7 de junio de 1982, durante la ceremonia por la libertad de expresión, el presidente José López Portillo dejaría para la posteridad y vergüenza de la política que se jacta de ser democrática,  una expresión que revela la turbia relación entre el poder y la prensa: no les pago para que me peguen.

Hoy día, a nadie le cabe duda  la existencia de esa prensa a modo, sin embargo el gobierno de López Obrador ha venido a trastocar la almibarada relación que durante décadas sostuvo la prensa y el poder.

El empoderamiento de las redes sociales debilitaron sorpresivamente a los medios tradicionales y con ello su virtual desplazamiento a grado del ocaso

Varios programas y periódicos han resentido  el efecto de las redes sociales. La falta de audiencia o de lectores ha obligado al cierre de sus  espacios. No hay duda que nos encontramos ante una nueva era de la  información y comunicación que en breve configurará un nuevo modelo.

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1 thought on “LOS RETOS DEL PERIODISMO ACTUAL”

  • Cierto, la información que nos llega por cualquier medio ya está tamizada, mentira lo de la libertad de expresión, cada vez asesinan a los periodistas honrados y subsisten los corruptos.