A diferencia de años anteriores, el programa de descuento “El Buen Fin”, iniciado por el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, en ésta edición 2014 el gobierno federal comenzó en sinergia con las empresas privadas y las instituciones bancarias para aumentar los meses sin intereses, así mismo con la Secretaría de Hacienda al hacer un sorteo para premiar a los consumidores con tarjeta de créditos.

En un principio con cierta incredulidad, dicho programa lleno de dudas, engaños y pocos aciertos, se fueron mejorando año con año y con la participación de la PROFECO para defender al consumidor de muchos que pasados de lanza desvirtuaron el concepto tratando de sacarle provecho al intento de la reactivación del consumismo.

Con el trascurrir de los últimos tres años llevando a cabo el programa de “El Buen Fin”, se fue puliendo el proyecto para poder impulsar la actividad económica en no solo buscar descuentos, sino también que el sector industrial se reactivara en un aumento de producción para que los intermediarios no intentara sacar los saldos anuales que se les iban quedando para hacer espacios nuevos a las mercancías o equipos electrónicos de reciente producción y con la últimas tendencias en tecnologías.

Para éste “Buen Fin” 2014, muy esperado por todos los comerciantes como un respiro para acumular o al menos salir “tablas” por el duro golpeteo de la paupérrima situación económica por la que pasa el país, se trazaron muchas metas tanto los negocios familiares, como aquellos desincorporados e inscritos también como miembros activos en las diferentes Cámaras de Comercio, CONCANACO, CONCAMIN, ANTAD, ABM, entre otros para poder fortalecer el mercado interno.

Las preparaciones fueron muchas para éste año en el “Buen Fin”, las esperanzas también, la mercadotecnia no podía faltar para inicio con bombo y platillo para vaciar a los millones de bolsillos de los mexicanos que como resultado y decepción de muchos comerciantes a nivel nacional las expectativas fueron desalentadoras para muchos Estados del país en donde se llegó a registrar una contracción en sus ventas comparadas a las de años anteriores entre 60 y 90 por ciento, como respuesta evidente a la crisis económica que vive el país.

Para muchos comerciantes resultó engañoso el “El Buen Fin 2014”, en donde los números no mienten y en una falsa justificación para los comerciantes creyendo que los “ganones” fueron las cadenas de las plazas comerciales quienes salieron beneficiados del programa que cada año han estado haciendo para reactivar la economía, pero lo que no saben es que ni siquiera los más grandes tiendas comerciales quienes fijaron como metas a los vendedores de incrementar el 25 por ciento, no pudieron lograrlo.

Lo que en un principio pareció un paraíso, tanto para consumidores como los comerciantes, resultó todo un engaño para los connacionales ya que en lugar de ayudar a los mexicanos, gran parte de la población salió perjudicada, pues se endeudaron con los bancos y alargaron sus deudas viéndose afectada un gran cantidad de la población que a la fecha de hoy todavía continúan pagando lo de dos años y el pasado de las “super” ofertas en donde más que ello el truco está en los plazos largos para dizque pagos chiquititos que nunca se acaban y evidentemente aumentando la cartera de morosos futuros clientelas para aquellos sabuesos de despachos de abogados quienes compran la cartera completa de deudores.

El país no está preparado para éste tipo de eventos donde realmente el concepto de oferta es la de bajar el costo considerablemente para que se pueda comprar de contado y no a crédito sin intereses. Pero sobre todo éste espectáculo para la reactivación económica, no se puede hacer cuando no existe un crecimiento en éste rubro lleno de desempleo e inseguridad nacional en donde es imposible la creación de nuevas empresas y negocios porque si no truenan con la nueva carga fiscal, son víctimas de asaltantes, robos, secuestros y extorciones telefónicas del crimen organizado derivados por el negocio del narcotráfico. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org