Por Luis Alberto González

En los primeros días de la invasión de Rusia a Ucrania, entre el miércoles y el domingo, se había contabilizado un total de 352 civiles muertos, entre ellos 14 menores de edad, además de 1 mil 684 heridos.

Eso en una conflagración con el más sofisticado armamento y ataques en ciudades donde se encuentra la gente viviendo.

Sin embargo, es más penosa la guerra que se vive en México y en donde hay cientos y miles de mexicanos asesinados por el crimen organizado.

El especialista en seguridad Ricardo Márquez Blas, dijo que la violencia en nuestro país es más grave que en la guerra en Ucrania y dio los siguientes datos: en la invasión de Rusia a Ucrania que inicio el 23 de febrero y al 25 del mismo febrero se tenían 104 muertes de civiles.

En México, del 25 al 27 de febrero se contabilizaron 198 homicidios dolosos en todo el país, aunque el grupo de seguridad interinstitucional informó que sumaban 234 los asesinados.

La prueba más palpable es lo sucedido el pasado domingo en San José Gracia en el estado de Michoacán, donde fueron prácticamente fusiladas 17 personas, aunque a dos días no aparecen los cuerpos y lo peor del caso es que la Secretaria de Seguridad Ciudadana del gobierno de la república afirma que sólo fue un enfrentamiento entre grupos criminales y no hay indicios de que haya habido muertos.

Es nefasta su explicación, ¿ustedes les creen?.

Tan sólo el Sistema Nacional de Seguridad reportó 2 mil 427 homicidios dolosos durante el mes de enero de 2022.

Hoy en México se vive terror, aumenta la barbarie en muchos estados como lo son: Guerrero, Michoacán, Jalisco, Sinaloa, Colima, Tamaulipas, Guanajuato, Baja California, Estado de México, Morelos, Chihuahua, Sonora, Zacatecas, Veracruz y parte de Oaxaca.

En Puebla también se han incrementado los homicidios dolosos y casi a diario se localizan cuerpos acribillados o desmembrados, por eso el gobierno empezó a realizar patrullajes y operativos en la zona conurbada de Puebla en los municipios

como San Pedro, San Andrés y Santa Isabel Cholula, Huejotzingo, San Martin Texmelucan, Coronango, Cuautlancingo, Amozoc, pero esas acciones las iniciaron el pasado fin de semana, ojalá den resultados.

Recordemos que sigue siendo un área difícil y conflictiva la zona del triángulo rojo, donde se ubican a Tepeaca, Acajete, Tecamachalco, Quecholac, Palmar de Bravo y Acatzingo, este último es uno de los municipios donde más asesinatos se registran y hay balaceras en pleno día.

Ante el escenario nacional donde más de la mitad de los estados están siendo controlados y dominados por el crimen organizado es necesario que en Puebla no se descuide la seguridad y como dijera el clásico: “Al ver las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”

Es hora que las autoridades federales, estatales y municipales realmente tengan una acción preventiva de los crímenes, porque saben perfectamente donde se ubican y quienes son los grupos criminales.

Ya es hora de actuar, no de abrazos y no balazos.

Porque muchos mexicanos se preguntan:

¿De qué sirve la Guardia Nacional tan pomposamente anunciada?

¿De qué sirve el ejército en las calles?

¿De qué sirve la marina supuestamente con su inteligencia policial?

¡Ya basta, de asesinatos y crímenes!

¡Ya basta de sólo quedarse viendo como México vive su propia guerra ante la complacencia de las autoridades!

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