*Molestar por Soberbia

*De Órganos Infantiles

*Especulan con el Arte

Una de las señales de ruptura entre los gobernados y la clase gobernante –así sea efímera, lo que no sucede en México si consideramos a cuantos viven del erario desde hace décadas, acomodados, sobre todo, en el Legislativo-, se da en el momento mismo en que se percibe la disparidad de las decisiones unilaterales de cuantos forman gobierno respecto a los criterios generales. Es una perspectiva, por desgracia, demasiado a la vista en los escenarios actuales: ni se pidieron consensos para las reformas peñistas –extraviándose el principio de “soberanía popular” sostenido por la Carta Magna-, y se golpea a la ciudadanía por todos los flancos posibles, desdeñando la paulatina depauperación del colectivo. Y lo mismo bajo la férula de dirigentes de distinta filiación política.

Una muestra: el gobierno del Distrito Federal, actualmente encabezado por Miguel Ángel Mancera Espinosa –tan decidido que aún no determina a cuál partido afiliarse pese haber sido nominado por el PRD en 2012-, impone nuevas normas sobre el programa “Hoy no Circula” alegando combatir con ello la contaminación ambiental… mientras no se toman medidas enérgicas contra las industrias que infectan el ambiente con humos y gases tóxicos de distintos grados. Y se sostiene, además, que el exceso de parque vehicular es la fuente principal del problema ecológico –aparte, claro, de los circos como animales como sostienen los irracionales asambleístas, deseosos de descender en la escala zootécnica, muy deseable porque con ello se percatarían de la realidad libres de las cursilerías de importación-, en las zonas urbanas.

De ser así, es necesario preguntar por qué no se exige a las empresas automovilísticas un mayor cuidado para evitar la emisión de los residuos carburantes por los escapes ruidosos –también la contaminación de los sonidos de altos decibeles es una grave afrenta contra la ciudadanía indefensa ante ellos-, y la posibilidad de que brinden lo necesario a quienes adquirieron hace años sus unidades y deben modernizarlas para reducir cualquier posibilidad contaminante. Por aquí debería empezarse antes de señalar a los automovilistas como si se tratara de criminales en potencia, listos a causar enormes daños a la atmósfera por exceso de ozono. ¿O van a decirnos que los transportes públicos tienen vigilancia adecuada para no ser éstos los de más altos niveles infecciosos, hasta para la salud de quienes los utilizan, apiñados entre consumidores enfermos, poco cuidadosos de su higiene y sin recato alguno por los derechos de los demás? También las conductas sociales derivan de los deficitarios comportamientos de las autoridades. No lo olvidemos.

Las reglas en la materia rebasan las funciones y límites de los funcionarios defeños. Por ejemplo, el pago de la tenencia es obsoleto por cuanto se impuso para tener una fuente directa de ingresos dirigidos a solventar los Juegos Olímpicos de 1968… esto es hace cuarenta y seis años. Con lo recaudado hubiésemos podido organizar estos eventos varias veces, con Mundiales incluidos, no sólo los de 1970 y 1986 sino los que vienen, por ejemplo cuando quede libre la sede de Qatar destinada a ser la anfitriona en 2022 por haberse arreglado con los mafiosos de la FIFA a quienes sentenció, con firmeza, el presidente de Uruguay, el admirable José Mújica Cordano, cuya decencia le obliga incluso a aguardar su turno en los centros médicos como cualquier otro ciudadano. ¡Con un mandatario federal así bastaría para salir de la estruendosa tendencia al dispendio de nuestra peculiar clase política, porque todos los demás tendrían que imitarlo!

Pero, además, ninguno de los “sabios” izquierdistas –eso dicen que son, cuando menos-, al servicio del gobierno del Distrito Federal, se animó a ser una simple ecuación para valorar los efectos de las nuevas normas para circular guiados sólo por afanes pecuniarios: ¿y las horas-hombre perdidas? Esto es, con menos vehículos es obvio que se perderá mucho más tiempo en los traslados desde los hogares hasta los centros de trabajo, sobre todo en el caso de las laboriosas mujeres que, por lo general, deben ser más cuidadosas de los transportes elegidos. Como siempre, primero se toman las medidas y luego se recogen y palian las consecuencias con palabrerías huecas y parrafadas sin sentido.

Ayer hablábamos de la creciente rebeldía cívica que no sabe cómo desahogarse sin ser reducidos a las tinieblas por obra y gracia de quienes tienen el poder y obran con absoluta impunidad. He llegado a escuchar que el término “soberanía popular”, que pocos articulistas usan, debe ser visto como obsoleto en un mundo moderno que debiera aspirar al derrumbe de las fronteras por obra de la globalización. No obstante quienes así piensan no saben cómo responder a un hecho evidente: la cada vez más inexpugnable frontera entre México y los Estados Unidos en donde ha sido trasladado el muro de Berlín con mayores longitudes, radares sofisticados y alambradas de ignominia. ¡Y todavía alegan que los helicópteros de la policía mexicana violan el espacio aéreo al rebasar la línea ¡por noventa metros!

La monserga es monumental porque en el Capitolio se insiste en que han sido trescientas las “invasiones” territoriales sufridas, desde México, por la escasamente blindada Unión Americana. A lo mejor, dentro de poco, se animan a invadir, otra vez, a Bélgica, por haberlos eliminado del torneo futbolero próximo a terminar ante la mirada irritada de Barack Obama quien, por supuesto, sólo se mostró antes del encuentro y no después, acostumbrado, como está, a ganar todas en cada uno de los renglones de la vida pública y privada. ¡Ya verá la FIFA, en un duelo de mafias titánicas, como le va!

Recuerdo, entrando en otros terrenos igualmente espinosos, cuando recibí, a mediados de 1991 –esto es en plena euforia salinista por la inminencia del Tratado de Libre Comercio-, una escueta misiva del embajador estadounidense, entonces John Dimitri Negroponte –lo califiqué en esos días como “negro-puente”-, quejándose sobre una información que las autoridades mexicanas se negaron a confirmar: el secuestro de niños, la mayor parte de ellos indígenas de las regiones más abandonadas de Guerrero y Chiapas, destinados a la donación forzosa de sus órganos en clínicas semiclandestinas instaladas en el sur de nuestro vecino del norte. Negro-puente afirmó que tal era imposible por las regulaciones estrictas que existían… pero sin responder sobre el paradero de los menores que obviamente habían sido “comprados” por familias de ese país.

Hoy sabemos que cuarenta y siete mil infantes cruzan ilegalmente la frontera siguiendo los pasos de algunos adultos a quienes dicen desconocer. Hablamos de quienes son detectados no de aquellos, que deben doblar el número, capaces de lograr su objetivo de andar hacia el falso “paraíso” en donde son esclavizados, si bien les va. Y, claro, con la demagogia habitual, hasta el señor Obama se dice interesado en atender la conflictiva planteada luego de años del tránsito infame promovido por la miseria de sus hogares, el imperativo de los padres por librarse de quienes no pueden mantener y las múltiples “ofertas” que pueden recibir los chicos, desde el servicio doméstico a escondidas hasta… la donación de órganos. Y de esto, ni media palabra, salvo las reiteradas excusas de la embajada estadounidense y las frases impregnadas de lugares comunes de los voceros de la Casa Blanca. Pero miles de nuestros niños han sufrido y siguen padeciendo un verdadero infierno en pleno tercer milenio.

Hay ocasiones en las cuales creo, de firme, que se trata de enfurecer al colectivo para medir su resistencia y también la capacidad de control de un gobierno rebasado en las zonas bajo el control de las mafias dominantes. Ya decíamos que, pese a la caída de “El Chapo” Guzmán Loera, y las ejecuciones y muertes supuestas de otros del mismo calado –digamos “El Azul” Esparragoza-, posibles integrantes del nuevo “cártel del Paraíso”, ninguna disminución se ha dado en cuanto a las exportaciones de drogas hacia el mayor mercado de consumo en el mundo, Estados Unidos, por supuesto, en donde los tráileres cargados de drogas circulan por las estupendas autovías construidas, en buena medida, gracias a las ofertas de crudo mexicano mientras allá se guardan sus reservas. Tal es el plan para dominar al mundo entero desde el centro de Washington. Y nadie lo ignora.

Debate

Recibí el mensaje de un amable lector de esta columna que corrobora hasta donde llega la especulación descarada de los financieros españoles incluso para arrebatarnos nuestra propia identidad. La misiva dice así:

“BBV Bancomer ataca el mercado del arte mediante comerciales “groseros, antiartísticos y burlones”; así calificaron los artistas plásticos los nuevos anuncios publicitarios de BBV-Bancomer que desdeñan las inversiones en obras artísticas y sugieren realizarlas en el banco que muestra “un claro y torpe desprecio por las inversiones en arte”, refiere Paul Achar, Presidente de la Sociedad Mexicana de Autores de las Artes Plásticas que agrupa a más de 50 mil pintores, escultores, grabadores, fotógrafos y diseñadores gráficos nacionales e internacionales.

“Además de ocasionar un gran daño a la comunidad artística, los anuncios de BBV Bancomer no son realistas porque el mercado de arte y antigüedades a nivel mundial supera los sesenta y cinco mil millones cada año y aumenta conservadoramente 8% anual respecto al ejercicio anterior”, comenta Achar. El anuncio publicitario de este banco que se jacta de apoyar la labor artística, sin que existan constancias de esto, “daña severamente a la comunidad artística mexicana que ahora sólo tiene 0.05% de la participación mundial, con 20 millones de dólares en operaciones. El resto se encuentra en la informalidad”, remarca Achar, quien dice que en la industria local imperan el desconocimiento y la desconfianza.

El artista plástico –reconocido por Angélica Rivera, “La Gaviota”, popular modelo de modas-, descubrió que la principal motivación para conservar y adquirir arte es el retorno de la inversión: 49% de los asesores aseguraron que sus clientes son impulsados por el rendimiento potencial de las inversiones, 39% contestó que por la diversificación del portafolio y 29% aseveró que sus clientes ven en el arte una cobertura contra la inflación. “ La inversión global en el mercado del arte representa noventa y seis mil veintiocho millones de dólares agrupados en 44 fondos de inversión en arte. Dos de estos fondos están en América Latina: el Brazilian Golden ArtFund y Artemundi Global Fund, que ya reúnen una suma de cien millones de dólares.

La Anécdota

Y eso no es todo. Posiblemente los banqueros hispanos, en general, tratan de devaluar el mercado del arte para hincarle el diente como es su costumbre. No olvidemos lo ocurrido cuando Banamex fue adquirido por el Citigroup estadounidense con toda su riqueza, perteneciente al patrimonio nacional. Ahora los españoles están listos para lanzar sus anzuelos:

“El arte es un activo real como el oro o la propiedad inmobiliaria, con la ventaja de que es portátil, tiene un costo de mantenimiento bajo y ofrece rendimientos estables a lo largo del tiempo”, refiere Achar, quien considera que la estabilidad de esta industria reside en los clubes mundiales de coleccionistas. La alianza que se genera entre los coleccionistas fortalece el mercado de tal manera que se vuelve una garantía. A los integrantes de esa red les conviene que la obra esté bien valuada. Por ello comprar arte es una manera de proteger el dinero ocioso.

Vale mencionar, finalmente, que entre el 2005 y el 2013, el activo más redituable fue el petróleo, con un retorno de 21.37% seguido del oro, con 18.4%. El arte presentó un rendimiento de 10.25%

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Web: www.rafael-loretdemola.mx

E-mail: loretdemola.rafael@yahoo.com

NIÑOS Y ARTE, SON LOS NUEVOS OBJETIVOS DE LAS MAFIAS FINANCIERAS INTERNACIONALES. LOS PRIMEROS, PARA CUBRIR LAS VACANTES QUE DEJA LA CRISIS ESTADOUNIDENSE EN PLENA FASE DE CRECIMIENTO NEGATIVO; LO SEGUNDO PARA SAQUEAR, COMO ESTÁ OCURRIENDO, EL MÁS VALIOSO DE NUESTROS PATRIMONIOS LUEGO DE LOS SERES HUMANOS. Y NUESTRO GOBIERNO SIGUE EMPEÑADO EN EVITAR QUE CIRCULEMOS COLOCANDO GARITAS INCONSTITUCIONALES DE LAS QUE SE BURLAN LOS NARCOTRAFICANTES.