Celestiales en las carreteras
Los grandes de edad los recordamos con nostalgia y las nuevas generaciones ni siquiera saben de su existencia, pero cuando hablamos de ellos con caras de incrédulos llenos de mofas, piensan que estamos locos cuando escuchan de los famosos ángeles en las carreteras.
Las nuevas generaciones consideran que sufrimos de alguna demencia porque no hallan explicación lógica de cómo es que el mundo celestial baje a las carreteras y mucho menos posible que un ángel acuda cuando existe algún desperfecto del coche en la carretera. Es ahí cuando te percatas que su ausencia, al menos en las carreteras de Coahuila ha sido tanta que no tienen conocimiento de qué son los Ángeles Verdes.
Recuerdo de la infancia que mi señor padre conocido entre los compañeros periodistas viejos y nuevos como el “Jefe Robles”, siempre ha tenido un gusto por manejar en carretera y hasta la fecha continua haciéndolo a tal grado que entre broma y broma la gente le dicen que tiene corazón de político, pero de los de antes no de los nuevos que no salen de sus cómodas y adaptadas oficinas modernas que parecen suite presidencial. Así ya podrán imaginarse lo mucho que recorrí en mis temporadas vacacionales por casi toda la República Mexicana.
El ”Jefe Robles” , se jacta de que en la otra vida, si es que existe, está seguro de que hubiese sido trailero o camionero por su apasionado gusto de transitar por las carreteras de México y los Estados Unidos, siendo tan fuerte ese gusto que lo ha hecho en algunos países de Europa, como España y Portugal. Esta afición o gusto lo lleva muy arraigado desde jovencito y ahora de viejo o adulto mayor a sus 73 años.
Hay muchas anécdotas y enseñanzas también, uno entre ellos los famosos Ángeles Verdes a quien me enseñó que se trataba de un grupo de guardianes dedicados a cuidar y proteger a los viajeros, al menos fue su explicación más sencilla para tan corta edad que tenía pero conforme fui creciendo me iba explicando más de ellos y de quiénes se trataban.
Entendí que los Ángeles Verdes trabajan arduamente por las carreteras de nuestro país, y éste grupo de personas que arriesgan incluso su vida, dejan a sus familias con la esperanza de regresar tan pronto culmine su guardia; los Ángeles Verdes, salen prestos a brindar auxilio mecánico y de primeros auxilios muy de madrugada a recorrer las arterias con el único afán de servir a los turistas.
Un servicio gratuito y una amable disposición es su sello característico, algo de que los Ángeles Verdes son la única corporación en su tipo y características en el orbe y portar el uniforme verde no es gracias a haber reunido una serie de requisitos, sino tener verdadera vocación y espíritu de servicio.
Hace décadas era muy común verlos circulando en carretera, pero ahora nada más se hacen presentes en temporadas vacacionales. Nadie sabe con certeza el motivo por el cual cada vez hay menos unidades rodando en nuestras vías de comunicación de nuestra entidad pero cada vez que sale uno hasta fiesta se hace quienes nos acordamos de aquella imagen y presencia constante en las carreteras coahuilenses. Motivo por el cual las nuevas generaciones casi no saben de su existencia.
Los Ángeles Verdes es un grupo muy reducido en Coahuila, en donde también se juegan la vida en el cumplimiento de su deber por estar expuestos también a los accidentes en donde conductores imprudentes no los respetan terminando por envestirlos en el momento de prestar alguna ayuda o simplemente porque cuando están en movimiento en las carreteras su velocidad es demasiada moderada.
Para quienes participan en el grupo de los Ángeles Verdes y ante todo va la humildad por delante lo único que piden es que no desaparezca a los Ángeles Verdes, que hoy por hoy, son una de las instituciones de servicio altruista de que los mexicanos disponen.
Recuerde que si se dispone a aventurarse por carretera y llega a ver a su paso una unidad verde recuerde que está trabajando un Ángel por la seguridad del prójimo y tal vez por la suya misma, para que se reduzca las estadísticas de accidentes viales. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org
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