Una tradición que debe seguir
Uno de los grandes distintivos de la ciudad de Saltillo, es el famoso pan de pulque, también conocido como el pan de fiesta, llevando entre sus ingredientes pulque y anís, y que se ha constituido como una de las grandes tradiciones de la ciudad.
Es muy común que cuando uno pasa por saltillo, o que un saltillense visita alguna amistad o familiar, no falta el encarguito del panecito que hace romper cualquier disciplina de dieta por ser tan irresistible.
Existen pocas panaderías quienes trabajan el pulque, o vino de tierra conocido así por nuestros antepasados los mazahuas y otomíes, quienes hacían el agua miel para su comercialización, fiestas, celebraciones religiosas, e inclusive para remedios medicinales.
La gran variedad de usos del pulque, afectó sobre todo en ésta región donde se trabaja para hacer el pan, con la helada sorpresiva que tuvimos en nuestro estado congelando gran cantidad de maguey de donde extrae el agua miel para poder procesarlo.
Aunque en sí el maguey es una planta muy resistente a las altas y bajas temperaturas lo que es el aguamiel se ve afectada por los cambios climatológicos ya que cuando se hace calor se hace agria porque su fermentación se acelera echándose a perder, pero con el exceso de lluvia se rebaja mucho.
Su demanda en la actualidad es mucha ya que las pocas panaderías que hacen pan dependen mucho de ello para poder el delicioso pan de pulque tan conocido como parte tradicional en Saltillo, pero el conseguirlo es muy difícil porque la mayoría de las plantas del campo fueron afectadas por el frío, así que el conseguir diez litros por semana es muy poco para la demanda tan grande del pan.
Sin poder recibir alguna ayuda de las autoridades se han visto a la necesidad de crear otra variedad de panes para su venta, pero al parecer la gente no los acepta por completo ya que la tradición está muy arraigada a las costumbre del consumo entre saltillenses y foráneos que siempre recuerdan el sabor del panecito de saltillo no queriendo imitaciones porque aquí es el único lugar donde no ha podido llegar la piratería por considerarse ya como una tradición familiar y un producto de artesanía.
La falta de preparación por parte de las autoridades para prevenir la afectación de la vida vegetal y flora por los cambios climatológicos es muy evidente y más cuando no existe la cultura para preservar lo que la naturaleza nos proporciona ya que no solo para hacer reposterías, sino también tiene un uso en el campo botánico, dentro de sus propiedades tiene la vitamina el Omega 3, que sirve para la formación de membranas celulares, hormonas y fortalecimiento del sistema inmunológico.
Por lo pronto las pocas panaderías en Saltillo, que trabajan el agua miel están sufriendo por la falta de pulque cada día tiene que estar viajando más lejos de nuestra comunidad para poder conseguirlo y seguir con la tradición saltillense. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013) www.intersip.org
Deja un comentario