México, 6 dic (PL) Como hace 100 años hicieron Francisco Villa y Emiliano Zapata al frente de un ejército libertador, miles de mexicanos se disponen a tomar hoy esta capital en reclamo por los desaparecidos, en particular los 43 de Ayotzinapa.
No será la única demanda de las columnas de campesinos, estudiantes, trabajadores y de otras organizaciones sociales que marcharán por el Distrito Federal cuando se cumplen 71 días de la desaparición de los jóvenes normalistas.
También enarbolarán la exigencia deprecios justos para los productos del agro y una política agraria que beneficie a miles de pequeños productores en desventaja frente a las grandes empresas transnacionales y el acuerdo de libre comercio entre Estados Unidos, Canadá y México TLCAN).
La víspera el Paseo de la Reforma recibió a una avanzada de manifestantes. Fue un tractorazo que impidió el tráfico por esa concurrida avenida.
El domingo 6 de diciebre de 1914 los destacamentos del Ejército Libertdor se reunieron en San Cosme con las tropas de la División del Norte.
Fue toda una sorpresa el desfile de unos 58 mil hombres del norte y del sur con sus armas al hombro. Aquella extraordinaria parada militar fue reseñada con entusiasmo por la prensa de la época.
Las fachadas de las casas estaban engalanadas con banderas y el sombrero del general Zapata parecía una canasta de flores y confeti. La infantería, la artillería y la caballería llevaban delante el estandarte de la virgen de Guadalupe, como hicieron los próceres por la independencia.
Cuenta la historia que la vanguardia de la columna llegó al Palacio Nacional a las doce y diez minutos. Los metales tocaron a libertad mientras que Villa y Zapata entraron a saludar al presidente provisional.
Al salir al balcón central del Palacio, ambos recibieron el saludo del gentío que llenaba la plaza de armas y fervor.
Cien años después, hoy será un día de protestas, de mantas con los rostros de los desaparecidos y de reclamos sociales, con Pancho Villa y Emiliano Zapata en la memoria.