Por Guillermo Robles Ramírez

Por más recomendaciones, exhortos y puntos de acuerdos tomados por el Senado de la República, para acabar con las cuotas escolares, el problema sigue y al menos en Coahuila que es el caso que nos ocupa, no ha habido hasta ahora autoridad que detenga esa histórica costumbre, siendo lo peor y más grave, el hecho de que las famosas cuotas colectadas por las sociedades de padres de familia de distintas formas y estilos son robadas, saqueadas o “desaparecidas”.

            Las tan mencionadas cuotas que, con la complacencia de los propios Inspectores, Directores y maestros de grupo exigen y obligan al pago la mayoría de las sociedades de padres de familia, son dizque para cubrir gastos inherentes a la operación de la escuela donde estudian sus hijos.

            En algunos casos sí se emplean esos dineros para cubrir requerimientos de las escuelas, ya que las autoridades educativas no tienen presupuesto para atender esas necesidades por lo que a los padres de familia se les solicitan y exigen “cooperaciones voluntarias”. La razón de esas cuotas es para la compra de trapeadores, escobas, utensilios de limpieza; mantenimiento de pintura de pizarrones, aulas y bardas perimetrales.

            Empero, nadie ha podido detener y menos actuar para poner un hasta aquí y no sigan las sinvergüenzas de directivos de ciertas sociedades de padres de familia, sumándose a esas arbitrariedades y abusos los propios inspectores y directores escolares, así como de maestros de grupo que, con artimañas y mentiras, engañan y “emboban” a directivos de sociedades de padres de familia al solicitar en calidad de “préstamo” ciertas cantidades que jamás regresan a las arcas de las susodichas sociedades.

            Tampoco con la “nueva modalidad”, termino utilizado, para vivir con las medidas de cuidados necesarios para evitar el contagio del Covid-19; o bien las clases en modo virtual, ha detenido el cobro de las famosas cuotas “voluntarias”, para la sociedad de padres de familia que pertenecen a distintas escuelas.

            Aun cuando se ha demostrado en algunos casos los fraudes y raterías en perjuicio de los padres de familia pertenecientes a las sociedades respectivas, no prospera a un seguimiento del caso o de manera legal, quedando solo en señalamientos y cambio de una nueva sociedad de padres de familias, que perjuran manejarse con transparencia y honestidad, repitiéndose la misma situación, una y otra vez.

            Cuántas veces los medios de comunicación han sido el portavoz de los padres de familia enfurecidos haciendo pública su inconformidad por las tranzás de un inspector escolar y el Presidente de la sociedad de padres de familia de ese centro educativo.

            Y cuántas veces ha hecho público en los medios de comunicación, la exigencia de esos padres de familia defraudados, a la devolución de sus cuotas.

            La recurrencia de estas indebidas y rateriles formas de algunos maestros, de desaparecer las cuotas escolares, continua en forma creciente, mientras que la llamada Asociación de Padres de Familia en Coahuila, con su hermético silencio e indiferencia de actuar, pese a las denuncias presentadas, se convierte en cómplice y tapadera de los padres de familia y profesores que abusan de la buena fe de los papás y mamás que cumplen religiosamente con el pago de las cuotas escolares, para que al poco tiempo estos recursos vayan a dar a manos ajenas abusando de su buena fe.

            Ante estos ilícitos y la apatía de la Asociación de Padres de Familia que está obligada a salir en defensa de los padres defraudados, son cada vez más quienes se niegan a colaborar con las cuotas escolares que se han convertido en dinero fácil para algunos profesores y directores de esas organizaciones.

            Ante esta situación, es difícil la desaparición de las uñas largas y menos mientras cuenten con el silencio y protección de la Asociación de Padres de Familia de Coahuila que agrupa a las sociedades de padres de las escuelas oficiales o llamadas de gobierno. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org