Arturo Ríos

Santiago Nieto, mal y de malas

Por Arturo Ríos Ruiz

* Tuvo un fugaz relumbrón en la 4T

* Fue procurador y hoy es profesor

A casi 3 años de encabezar la UIF, Santiago Nieto renunció, pero reafirmó su lealtad al presidente Andrés Manuel López Obrador. Antes de la UIF, fue elegido en 2015 como titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales, FEPADE.

Como titular de la UIF, de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, simbolizó la guadaña presidencial, dio a conocer que, aplicó a 21,375 cuentas congeladas, con más de 4,000 millones de pesos, de políticos en la mira gubernamental.

Bajo su mandato, la UIF congeló cuentas de Eduardo Medina Mora, renunciado como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación; igual al petrolero Carlos Romero Deschamps, Rosario Robles, Juan Collado, al empresario Alonso Ancira, éste, por señalar financiamiento de un documental contra el presidente.

Santiago fue fiscal electoral con Enrique Peña Nieto, con AMLO se enroló en la cruzada contra la corrupción desde el frente financiero, con el que emprendió procesos contra políticos y acaparó la atención popular.

Se fue contra Genaro García Luna, con el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García de Vaca y el exdirector de Pemex, Emilio Lozoya, de quien presentó seis denuncias ante la Fiscalía General de la República, FGR.

Se sentía tan fuerte que tuvo conflictos con el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, que en aquellos tiempos gozaba de la predilección presidencial, aunque hoy es un enigma su condición; dicen que la edad y su enfermedad lo tienen postrado.

Andaba en las nubes del poder, pero enseñó su parte nublada de la ambición en su boda fastuosa, con la consejera electoral Carla Humprey, en la ciudad de Antigua, Guatemala, con más de 300 invitados, que resultó un “asunto escandaloso”, y con ello tronó como poma de jabón.

Se fue como encargado de despacho de la Procuraduría General de Judicial del estado de Hidalgo en sustitución de Alejandro Habib Nicoláscon el hoy ex priista Omar Fayad Meneses.

Al renunciar en Hidalgo, buscó la oportunidad de un escaño en el Senado de la República por su estado natal, Querétaro, que no logró. Hoy, es profesor de las divisiones de estudio de posgrado de la Universidad Panamericana y de la Universidad Nacional Autónoma de México. Igual que otros políticos que se quedan a saga del cargo oficial y se refugian en la docencia para esperar.

Con todo el derecho que cuenta como cualquier mexicano, Santiago, pasó de fama y temeridad, a un nivel en el segundo plano en el engranaje gubernamental, quedaron atrás los tiempos que, por su fuerza política y sagacidad, ya se le apuntaba para gobernar Querétaro su entidad.

A estas horas del partido, todo indica que, a Santiago Nieto, ya se fue el tren, a menos que logre el rescate de Claudia Sheimbaum y que lo autorice el mandatario y que ésta ganara la elección.  Ya falta poco para la contienda principal del país y estaremos en condiciones de comentar.

rrrart2000@hotmail.com y Facebook

Deja un comentario