Por Guillermo Robles Ramírez

            Soy egresado de la Universidad Iberoamericana Laguna, en la Licenciatura de Comunicación, y aunque no especializado en el periodismo pues en aquel entonces la única escuela de esa profesión con reconocimiento nacional se encuentra en la CDMX.

            Posteriormente tuve que tomar algunos posgrados para poder complementar mis conocimientos en diferentes áreas de la comunicación y entre ellos el periodismo.

            Pero aun así con toda esa preparación siempre he reconocido a mis maestros porque honestamente tuve excelentes catedráticos, pero también al que más le reconozco y lo he manifestado en mis columnas mi mejor mentor en el periodismo es y ha sido el periodista Carlos Robles Nava.

            Muchas enseñanzas, anécdotas, y vivencias que he tenido en el ramo del periodismo desde muy temprana edad, el cual el motivo de lo mencionado es que en el evento que asistí el día de ayer miércoles en donde el Alcalde Manolo Jiménez Salinas, acompañado del Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, en la explanada del Museo del Desierto, se entregaron  102 patrullas con una inversión que supera los 59 millones de pesos entre la coordinación de ambos mandatarios en donde se fortalece el parque vehicular para la seguridad de los coahuilenses.

            Vehículos nuevos, equipados con toda la modernidad y tecnología en las que 47 patrullas fueron destinados a la Fiscalía General del Estado de Coahuila, 30 para la Policía Municipal y 25 para la Secretaria de Seguridad Pública.

            Durante el evento cuando hablaron ambos mandatarios, es decir, el Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, y el Alcalde de Saltillo, Manolo Jiménez Salinas, tocaron un tema que seguramente para la mayoría de los mexicanos ha sido muy polémico: los migrantes.

            Ambos coincidieron en la concientización con respecto el por qué había la necesidad de ayudar el paso a la caravana de migrante en la ciudad de Saltillo, así como la creación del albergue para 1700 personas que buscan el sueño americano.

            Aunque como dice el gobernador, así como también el alcalde que la única manera de entenderlos y sensibilizarse es conviviendo con ellos porque es ahí en donde conocen sus conductas distintas, diferentes intereses, otros engañados, así también como algunos que van provocando la molestia de muchos mexicanos. No solo se trata de adultos, sino también en ese pasar hay niños y niñas que pueden representar a los hijos de muchos coahuilenses y eso hay que tenerlo en mente.

            Una observación sobre este tema lo hiso el Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, con respecto a la información manejada en los medios de comunicación muy objetiva en la que tanto el Alcalde Manolo Jiménez Salinas y él unieron esfuerzos para ayudar a la caravana de migrantes, sin embargo, hasta ahí llegó la noticia, sin ver el fondo o parte de gran importancia de ello que trasciende el motivo.

            Fue ahí en ese comentario que me recordó una de las muchas enseñanzas que el periodista Carlos Robles Nava, me narró cuando era reportero en el periódico “El Siglo de Torreón”, teniendo como su jefe inmediato al fundador don Antonio de Juamblez y Bracho, cuando llegó al periódico notificándole personalmente sobre un saldo cero de accidente en un periodo vacacional, y diciéndole a don Antonio que por esa razón no había nota informativa de ello. En ese momento el fundador del periódico lagunero corrigió al periodista con exclamación firme: “esa es la noticia! …esa es la nota! No toda la información debe de ser mala”.

            En efecto el Gobernador tiene toda la razón y hay que reconocer que faltó la sensibilidad profesional de los comunicadores, porque fue una nota sin color, sino simplemente informativo y sin trascendencia.

            Nadie sabe o se cuestionó con respecto quién les pago el transporte de esta caravana en plataformas de camiones de diversos tamaños representando un alto riesgo para niños, niñas, hombres y mujeres. Es muy evidente que ellos no tienen dinero para pagar el transporte, así como el consumo de la gasolina, así que alguien tuvo que realizar el pago. Una persona o un grupo anónimo que nunca se sabrá.

            Pero tampoco se sabe quién les dijo o porque tenían que pasar exactamente por Coahuila, y por la cabecera municipal de Saltillo. Como tampoco se sabe con qué propósito. Este será otro misterio más de la caravana del migrante para poder llegar a los Estados Unidos.

            “Nadie por encima de la ley”, como lo dice en repetidas ocasiones el Gobernador Miguel Ángel Riquelme Solís, en diferentes eventos, como tampoco nadie va estar por debajo de la ley, fue la actuación del Gobierno de Coahuila, al respetar los lineamientos de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos, no solo para el migrante, sino también para los coahuilenses.

            El haber contenido a 1,700 personas integrantes de la caravana migrante en Saltillo, se evitó posibles escenarios que pudieron haber causado tanto el reclamo del sector empresarial, comercial y sobre todo social.

            La actuación con responsabilidad tanto de Manolo Jiménez, y Miguel Ángel Riquelme, fue muy oportuna desde la llegada, su estancia, pero sobre todo su partida hacia el municipio de Piedras Negras, pues se les dignificó el transporte seguro, puesto que peligraba la integridad sobre plataformas de vehículos de carga, y están contenidos en el municipio del norte de Coahuila.

            Muy independientemente de la sensibilidad de ambos mandatarios, se está actuando con la responsabilidad de que nadie esté por encima de la ley, como tampoco por abajo, en donde se va blindar el estado de Coahuila de Zaragoza para impedir el ingreso o paso de quienes no tengan una situación legal para transitar, algo que también se debería estar haciendo al sur del país, en especial en la zona fronteriza de la parte baja de México. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria “Antonio Estrada Salazar” 2018) www.intersip.org