Fútbol y violencia
Por Arturo Ríos Ruiz
*Querétaro gran tragedia
*Que iniciaron delincuentes
En junio de 1983, cinco personas resultaron con quemaduras graves al explotar unos cien globos inflados con hidrógeno, que fueron lanzados al cielo para festejar el final del campeonato mundial de fútbol juvenil, en el estadio Azteca de México.
En el marco del clásico capitalino entre Pumas y América, aconteció, en aquel momento, uno de los episodios más trágicos en la historia del fútbol mexicano.
El 26 de mayo de 1985, cinco meses antes del terremoto del 19 de septiembre, fallecieron ocho personas en el túnel 29 del Estadio Olímpico Universitario. El jefe de la policía de entonces Ramón Mota Sánchez, estaba muy cómodo en gradas especiales y ni cuenta se dio del percance.
La Fiscalía de Querétaro inició carpetas de investigación por lo ocurrido en el Corregidora, incluida una por homicidio en grado de tentativa
Bien, en el nuevo en Querétaro, la cifra de heridos tras el enfrentamiento entre aficionados de los equipos mexicanos Querétaro y Atlas, creció a 26, entre ellos hay tres en estado de gravedad, informó el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri González. Desbanca a todos e impone nuevo récord en heridos y se afirma no hubo decesos, sin dejar de ser una gran tragedia.
En algunas publicaciones guanajuatenses, ya se suman versiones que fue un encuentro entre maleantes: como que un líder «huachicolero» llamado «el Beto» participó en la trifulca, se enfrentó a un integrante de la barra 51 del atlas, ligado con el CJNG. Digno de una línea de investigación para las autoridades.
Un seguidor de Los Gallos, a quien le tumbaron dos dientes, dijo a Grupo REFORMA que un líder de huachicoleros de San Juan del Río, Querétaro, conocido como «El Beto», llevó a miembros de su banda para agredir.
«Llevó a sus sicarios, a la gente que ocupa para robar combustible y gas LP. Fue la que participó en la golpiza», contó el joven.
“El Beto» rivalidad de un integrante activo de la barra 51 del Atlas presuntamente ligado con el “Cártel Jalisco Nueva Generación”, según el testimonio. Una veta para las autoridades judiciales que no deberían descuidar para esclarecer un acto bárbaro que ha exhibido a México como un país primitivo y violento.
Otra opinión es que se deben endurecer las reglas para el comportamiento de las famosas porras conformadas por fanáticos, pulir la vigilancia y no cubrirlas por empresas privadas que en algunos casos ni ejercitan a sus elementos, por lo que sólo hacen presencia inútil.
México ocupa el cuarto lugar de los países con mayor puntuación de criminalidad en el mundo, reveló el Índice Global de Crimen Organizado Transnacional, asunto que todos conocemos porque lo vivimos en todo el ámbito nacional.
República Democrática del Congo con 7.75 puntos; seguido por Colombia, con 7.66; Myanmar, con 7.59; México, con 7.56 y Nigeria, con 7.15 puntos. De acuerdo con esta investigación, estos países experimentan conflictos o algún tipo de fragilidad institucional. Hagamos algo ya, para evitar la deshonra.
rrrart2000@hotmail.com y Facebook
Deja un comentario