Por Arturo Ríos Ruiz  

*Ignora el tema de la viruela 

*En 1951, inició la vacuna en México 

Es llamativo el discurso del presidente, sobre todo el de ayer en que propusoque en España se ayude porque todavía en los libros de texto se enseña que vinieron a civilizarnos. Hasta quiere influir en sus asuntos internos. 

Recordó que cuando llegaron los conquistadores a lo que es México hoy, contaba con 16 millones de habitantes y tres siglos después México apenas tenía 8 millones porque se trajo la viruela y en tres siglos ni siquiera fueron capaces de crear una vacuna. 

Y, agregó: “Lo que ahora llevó un año, vacuna contra Covid-19, en aquel entonces consumió tres siglos. Entonces dónde está el adelanto ¿Cuál es la esencia de la civilización? ¿Cuál es lo principal? ¡El ser humano! Y si en vez de aumentar la población se redujo ¿Dónde está el progreso?”. 

Primeramente, debemos recordarle que el primero que usó la ciencia para prevenir una enfermedad, en lugar de curarla, fue el médico inglés Edward Jenner, que en 1796 desarrolló la primera vacuna de la historia. 

Y que, en 1804, Francisco Xavier Balmis, realizó la expedición filantrópica desde España al Continente Americano para introducir la vacuna anti–variola, enfermedad que produce la viruela, que representó la primera campaña mundial de erradicación contra una dolencia y, que México logró eliminar la viruela en 1951 mediante una campaña nacional 

En los renglones inmediatamente anteriores, está la explicación de la devastación de la temible viruela en aquellos tiempos, ni en toda Europa existía un antídoto y el mal acababa con las vidas. 

La comparación de que, en un año, se creó la vacuna anti covid y en aquella época se llevó más de tres siglos, es una aberración por carencia de sentido común; hoy la tecnología en todos los rubros es impresionante y lo confirman los avances por todos los ámbitos en el mundo entero. 

Esta es una ambigüedad, tunde a España y luego, en contradicción expone: “Aunque se quiere “mucho, mucho” al pueblo español, el tema de la Conquista tiene que ver con las élites, “que tienen una arrogancia, ínfulas de superioridad, no saben ser humildes”.  

Agrega: “No estoy culpando a nadie, nada más es ‘a ver, vamos debatiendo’”, señaló. Quienes leemos, nos arrinconamos en un “¿Por fin?” Quiere a los hispanos y los tunde al mismo tiempo ¡Vaya con este retruécano! 

Y, cuando, él mismo se pregunta ¿Qué adelanto tuvimos? Sí, la universidad; sí, la imprenta; sí, otras cosas. No le alcanza comprender que hace 500 años la mentalidad mundial era totalmente diferente a la actual, por eso la evolución de la sociedad en todos los sentidos en el orbe. 

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