El vecino de al lado

No hay mascota perfecta para todos. Tal vez usted ha tenido aves, hámster, serpientes, arácnidos, gatos o bien peces. Pero indiscutiblemente un perro es la mejor opción para muchas personas. Los perros y las personas han desarrollado vínculos emocionales profundos y los perros son considerados como grandes compañeros por muchas razones hasta el grado de dar su vida para proteger a su amo pidiendo muy poco a cambio.

Se tiene el dato de la existencia del perro hace más de 30 millones de años, pero su antepasado con el que lo relacionamos más parecido a la época moderna de la humanidad es la figura del lobo, como su ancestral origen, pero el perro doméstico no apareció hasta hace doce mil años atrás.

Probamente fueron los egipcios y los romanos que empezaron a darles un uso de labor, doméstico o simplemente de custodio para los esclavos, pero es definitivamente que ha participado durante la historia de la humanidad dejándonos un registro en nuestra historia.

Uno de las etapas más marcada fue en la Primera Guerra Mundial, con el adiestramiento de los perros militares era tan específico como si fuera el de un arma para un soldado porque su importancia era vital para poder hacer llegar los mensajes entre sus tropas, aunque tenían otras funciones como el sustituir la vigilancia en las noches, transportar heridos y hasta artillería ligera.

En la medida que el ser humano fue avanzando en su historia a lo que somos al día de hoy la utilización de los canes domésticos fueron siendo menos en su uso laboral pasando a ser en la actualidad un acompañante y en otros casos hasta un miembro más de la familia.

Muchas de las veces se nos olvida la gratitud que deberíamos de tener por la importancia que representaron en algún pasado y la falta de conciencia nos lleva a ser irresponsables teniendo la misma humanidad en la necesidad de crear leyes y reglamentos que los protejan, creando así derechos y obligaciones.

Y muy a pesar de la existencia de leyes al perro no se le ha dado el respeto y lugar apropiado a éste animal doméstico ya que la mayoría de sus dueños los dejan sueltos en la calle por innumerables justificaciones tontas cuando en realidad no debería existir alguna.

Muchos de los casos han perdido el interés por parte de sus amos no dedicándoles el tiempo suficiente como para llevarlos a pasear prefiriendo que se paseen solos y otros simplemente porque consideran que las calles son el patio de sus animales por no tener el espacio suficiente en sus domicilios y evitarse el trabajo de tener que limpiar sus depósitos de boñigas.

El tener un animal doméstico tiene obligaciones legales como las que existen en la Ley de Protecciones a los Animales del Estado de Coahuila de Zaragoza, y también aquellas que incumben al mismo rubro en los municipios.

Uno de las principales obligaciones es mantener los animales limpios porque éstos pueden generar enfermedades propias por la falta de la limpieza como las garrapatas portador principalmente de los perros.

Éste parásito compañero del mejor amigo del hombre lo acompaña desde la existencia del perro siendo uno de los principales causantes de enfermedad mortíferas conocido entre la comunidad como la “Fiebre Manchada”.

La enfermedad causada por la picadura de la garrapata no es muy difundida en los medios de comunicación porque en lo general causa pánico, pero al igual que no son tan difundidas aquellas acciones hechas por las autoridades para erradicar dicha enfermedad e incluso la fumigación y nebulización de la aplicación de algún insecticida.

La necesidad de realizar éste tipo de acciones es sus dueños no mantienen limpios a sus canes. Pero aunque hay datos que la temporada de lluvia es cuando predomina la presencia de éste parásito y no obstante habiendo regiones de fuertes sequías la falta de higiene de los animales domésticos en lo principal el perro, es el portador de la garrapata que en un descuido por la poca atención y olvido que se les puede dejar estarían exponiendo a su familia a una enfermedad mortífera principalmente para los menores de los hogares.

No hay justificación alguna para tener los perros sucios pues tan solo hay que recordar que también los animales son la proyección de sus dueños, así que ya saben si tienen un perro sucio de vecino eso significa que también tiene a un vecino sucio viviendo a su lado.

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