Por Guillermo Robles Ramírez

“Amigas y amigos, magistradas, magistrados de este tribunal, dirigentes de los partidos políticos, presidente de la suprema corte de justicia, presidente del instituto electoral, amigas, amigos, todos quiero recordar que hoy nació un gran dirigente social, un día como hoy Emiliano Zapata y hace 1 año exactamente día como hoy falleció un amigo entrañable compañero Jaime avilés…” Así inicio su discurso Andrés López Obrador, hace cinco años atrás y continuo, “…el principio de que al margen de la ley nada y por encima de la ley nadie; en lo que a mí corresponde en mi carácter de titular del ejecutivo federal, actuaré con rectitud y con respeto a las potestades y la soberanía de los otros poderes legalmente constituidos. Ofrezco a ustedes señoras, señores magistrados, así como al resto del poder judicial, a los legisladores y a todos los integrantes de las entidades autónomas del estado; que ¡no! habré de entrometerme de manera alguna en las resoluciones que únicamente a ustedes competen. En el nuevo gobierno el presidente de la república no tendrá palomas mensajeras; ni halcones amenazantes; ninguna autoridad encargada de impartir justicia será objeto de presiones, ni de peticiones e ilegítimas cuando esté trabajando en el análisis, elaboración o ejecución de sus dictámenes y habrá absoluto respeto por sus veredictos el ejecutivo no será más el poder de los poderes ni buscará someter a otros poderes cada quien actuará en el ámbito de su competencia…”

Esto fue un extracto de una cuartilla y media del discurso de Andrés Manuel López Obrador, como presidente electo de México, en la Sesión Solemne ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, el miércoles 8 agosto de 2018.

Lo anterior es solamente una pequeña muestra de lo mentiroso y falta de palabra que tiene el Presidente de México, así como la Cuarta Transformación; que para efectos prácticos es unicelular, y al día de hoy son atacados para desintegrarlos con la eliminación de los 13 fideicomisos del Poder Judicial de la Federación, sin un argumento sustentado legalmente. Y por esa misma razón, el amparo que interpondrán los trabajadores del Poder Judicial tendrá que prosperar, ya que no se trata de afectar a 11 magistrados, sino a 45 mil trabajadores y familias mexicanas que también pertenecen a lo que AMLO llama pueblo de México.

Posiblemente para el resto de los mexicanos que no pertenecen al Poder Judicial de la Federación, están muy confiados a que se trata de algo ajeno o bien que no afectará en un futuro inmediato. Pero no hay que perder la importancia porque es algo que puede sucederle a cualquiera de nosotros y a los pensionados o jubilados inscritos ante el IMSS o ISSSTE.

Para entender su magnitud, es importante definir que el fideicomiso, y en palabras simples, se trata de una figura jurídica que administra ya sea recurso o patrimonio. Así como la misma figura jurídica que tiene el IMSS e ISSSTE, cuando resguarda todas esas aportaciones patronales y trabajadoras, para el día que cumplas los requisitos, cuando llega el tiempo de sacar una vivienda o bien para tu vejez en una jubilación o pensión.

Asimismo, se trata el fideicomiso del Poder de la Federación, en donde esos recursos que fueron adquiridos como derechos laborales, están depositados el dinero de más de 55 mil empleados de la dependencia gubernamental federal y que constituyen los derechos laborales de seguridad social, en donde se incluye pensión, vivienda, derecho a la salud y retiro. Y ahora de la nada el Presidente de México y la Cuarta Transformación les están quitando solo porque sí.

El resto de los mexicanos tenemos que pensar que, si eso están haciendo la Cuarta Transformación, y todo aquel que llegue al poder de México, puede asegurar que harán lo mismo con las aportaciones patronales y parte trabajadora depositadas ante el IMSS e ISSSTE, y que son descontados desde nuestros recibos de nómina.

Le pregunto al lector si le gustaría que sus aportaciones fueran destinadas para un proyecto del Tren Maya, o bien, para los pensionados de la CFE, porque la edad máxima para que los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad se jubilen es a los 30 años de servicio y con el 100%, además de cumplir 55 años de edad.

Así que, si usted no es trabajador del Poder Judicial de la Federación, no debería de estar tan relajado porque esto mismo pude pasarle a cualquiera de nosotros o al resto de los mexicanos, por estar la Cuarta Transformación, en el poder de los poderes. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México, Presea Trayectoria Humberto Gaona Silva 2023) www.intersip.org