Del mismo cuero…
Por Guillermo Robles Ramírez
Desde tiempos inmemorables, el gobierno federal habla y da cantidades de la enorme evasión fiscal que hay en México. Estima que más del cincuenta y cinco por ciento de aquellos que reciben un ingreso desde pequeñas, medianas y grandes empresas, prestadores de servicios, compra-venta de mercancía, profesionistas, etc., no pagan impuestos o bien realizan una serie de argucias para no cumplir con el fisco, además, de quedarse con el IVA.
Repetidamente, se anuncia que se hará un programa de acción inmediata para meter al redil a los evasores. Pasa el tiempo y nada. Los señores de Hacienda se la viven diciendo que ahora sí se les cobrará a los evasores y no pasa nada.
Aun en tiempos modernos o actuales, en donde es el mismo contribuyente trabajador del SAT, en donde es él mismo haciendo funciones de autodeterminarse alguna irregularidad porque ahora todo se maneja de manera digital y conectado directamente las autoridades hacendarias. Desde la emisión de una simple factura se timbra en hacienda, así como también sucede con los pagos en donde se les avisa a las autoridades fiscales por medio del complemento de pago. Lo mismo sucede con la emisión de recibo de nómina para los trabajadores, éstos son timbrados tanto para fisco hacendario, así como para las autoridades del Seguro Social.
Sin embargo, aun con toda esta tecnología, constantemente los hemos visto anunciado en periódicos nacionales como el gobierno federal da a conocer estimaciones millonarias de pesos cada año que se deja de percibir de aquellos que no pagan contribuciones.
Según el gobierno federal, los legisladores deben reforzar los mecanismos de control y fiscalización para combatir esta dolorosa pérdida de ingresos para que el gobierno pueda hacer más obras, aunque todos sabemos que en la actual Administración federal la única obra existente es la del Tren Maya, quien está suspendida por falta de permisos del impacto ambiental y un aeropuerto internacional que solo sirvió para que México fuera degradado a la categoría 2, por la Organización de Aviación Civil Internacional, por no cumplir las normativas de seguridad. Y algo que tampoco es un secreto porque todos lo estamos viviendo es que no existen obras del gobierno federal en las entidades municipales y estatales con recurso del SAT.
De acuerdo con el planteamiento de Hacienda, es responsabilidad de senadores y diputados federales hacer más duras las leyes, para “dizque” acabar con los evasores y, opino lo contrario, pues más que endurecer las leyes fiscales que ya existen, lo que se tiene que hacer es aplicarlas, pero sobre todo vigilar y supervisar, lo que nunca hacen las autoridades hacendarias y quieren que sea el contribuyente el que les esté diciendo donde hay evasores totales y parciales, aunque cuando se denuncian no actúan, y menos intervienen.
Si en verdad se sometiera al riguroso pago de impuestos a todos los que de una otra forma producimos economía, otro cantar sería para México y por lo pronto, independientemente de que se duplicarían los ingresos, lógico es que se tendría un cien por ciento más para obra y en consecuencia el gasto y carga de mantener al país sería menos pesada para la mitad de los contribuyentes que pagan en la actualidad.
Hacienda, más que nuevas leyes o endurecen las que ya existen, debe poner a trabajar a tanto profesionista desempleado, contratándolos de inspectores o notificadores para detectar a la mayor posible de evasores y del mismo cuero saldrán las correas, como dijeran los rancheros, pues con el incremento en el ingreso gracias a esa inspección y actuación se pagarían los sueldos de toda esa gente que mandaría a la calle.
Para las autoridades de Hacienda y SAT, hay dos cosas que sí sabe hacer bien. Cobrar a los que ya tienen cautivos y auditar para exprimir a los mismos de siempre lo que tiene sus riesgos porque los llamados los mismos de siempre también se cansan. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org
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