Por Guillermo Robles Ramírez

Qué pasa cuando a usted o bien a algún pariente, amigo, compadre, etc., le roban objetos de cualesquier tipo del interior de su vehículo o también, y por qué no, toda la unidad automotriz, cuando está en el interior de un estacionamiento público o perteneciente a un negocio.

Qué tanta validez tienen los escritos o advertencias que se hacen pintadas en los muros interiores de ese estacionamiento particular o público, señalando que no se hacen responsables de lo que le pase o roben del vehículo.

¿Tienen razón o no?, esos dueños o comerciantes quienes ofrecen ese servicio de espacio de estacionamiento ya sea abierto al público general, es decir, conductores o bien, hay quienes cobran una renta a negocios que carecen de estacionamiento propio asignándoles un espacio en específico y horario para que dejen sus vehículos estacionados ya sea para sus trabajadores o clientes; pero en ambas situaciones solo cobran el espacio y tiempo pero se deslindan de responsabilidad sobre cualquier acto ilícito que cometan ya sea robo en el interior de las unidades automotrices, así como cualquier daño físico a la propiedad, como un rayón en la pintura, abolladura o golpe por otro vehículo.

Sí es así, podrían catalogarse como patente de impunidad por parte de las autoridades, porque el delito se consumó en cualesquiera de los casos dentro de los estacionamientos públicos o de negocios comerciales, en perjuicio de un cliente y se quiera o no aceptar debe existir una responsabilidad y obligación de daños.

El tema es cuestionable, pero además, durante decenas y decenas de años, las autoridades le han rehuido para no precisar y definir si esos negocios tienen o no obligación de contar con vigilancia propia, pero además de que se hagan responsables de los daños que puedan ocasionar al vehículo de su cliente o bien del robo de pertenencias.

Muy saludable resultaría, pero sobre todo, que significaría puntos buenos para los legisladores o bien, diputados locales o federales hicieran alguna iniciativa o ley específicamente para estos casos, o en caso de que existan hacerla valer o cumplir porque las leyes que se hacen pero que no están bien instrumentadas es lo mismo que nada.

Es incongruente que solo exista la ley para los propietarios de comercio como restaurantes, supermercados, tiendas de ropa, etc., que cuando sufren de un daño físico, robo o cualquier otro acto ilícito tengan esa oportunidad de que se les repare el daño una vez integrada la averiguación y obviamente haber encontrado al infractor.

Sin embargo, eso no sucede lo mismo para el caso de los clientes quienes visitan al sector comercio y sus vehículos sufren de algún robo o daño, no tengan esa oportunidad de integrar con elementos y leyes sólidas para que se les repare el daño.

Si bien es cierto que los comercios y dueños de estacionamientos públicos se deslindan de toda responsabilidad, también es cierto, que los mismos propietarios quienes rentan parqueaderos permiten que a esos lugares entren cuidadores y lavadores de unidades motrices, lo que resulta muy cómodo para esos negocios tener sin responsabilidad ni costo quien cuide y lave carros, aunque no faltan los dueños listos e inteligentes que les cobran una cantidad a los lavadores de vehículos por cada servicio que dan, y hasta por el uso del agua.

Esta es una situación generalizada en los diferentes municipios de Coahuila, y sin importar el tipo de negocio comercial o restaurante sobre todo en este último mencionado hasta en aquellos denominados de lujo, también suceden los robos o percances a los vehículos, en donde al final nadie sabe quién fue el infractor como tampoco se sabe quién va pagar ya que también los restaurantes aplican la misma norma de deslindarse de toda responsabilidad.

¿Por qué los dueños de esos negocios no asumen responsabilidad alguna?, y la respuesta a ello es más que obvio, es decir, es gracias a las autoridades, diputados locales, legisladores que le “sacan” , reglamentar esa situación.

Tanto nuestros legisladores y diputados locales, están tan sumergidos en buscar iniciativas que sean motivo de los reflectores de los medios de comunicación, aunque pasando unos meses ya nadie se acuerde qué fue lo que hicieron estando ahí o quién logró concretar una iniciativa a ley.  (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México, Presea Trayectoria Humberto Gaona Silva) www.intersip.org