*La tasa de victimización en Chiapas creció un 30%.

*La pérdida de empleos permanentes la causa más directa en este crecimiento.

El día de ayer, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó los resultados de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción Sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2014.

El propósito de la ENVIPE es generar información a nivel nacional y por entidad federativa sobre el fenómeno de la victimización delictiva y, al mismo tiempo, dar información sobre la percepción social respecto de la seguridad pública y el desempeño de las autoridades.

La tasa de víctimas es uno de los principales indicadores que se generan con las encuestas de victimización y que se conoce también como la prevalencia delictiva.

Para ello, la ENVIPE ofrece información estadística importante como apoyo para los procesos de política pública en esta materia.

La ENVIPE permite hacer estimaciones sobre la victimización que afecta de manera directa a las personas o a los hogares, tales como robo total de vehículo, robo parcial de vehículo, robo en casa habitación, robo o asalto en calle o transporte público, robo en forma distinta a las anteriores, carterismo, allanamientos con robo en patio o cochera, abigeato, fraude, extorsión, amenazas verbales, lesiones y otros delitos distintos a los anteriores como secuestros y delitos sexuales.

Algunos delitos como narcotráfico, delincuencia organizada y el tráfico de indocumentados, no son susceptibles de medirse en esta encuesta de victimización.

La ENVIPE 2014 contiene información recabada durante el año 2013 y hace un comparativo con los resultados que se generaron en el año anterior, es decir, durante el 2012.

Desafortunadamente, el Estado de Chiapas va de mal en peor en esta fundamental y preocupante materia.

En el año 2012, la Tasa de Víctimas por cada 100 mil habitantes entre la población chiapaneca de 18 años y más, fue de 12,620.

Aunque este resultado se significaba como la Tasa de Víctimas más baja entre todas las entidades del país, no es una cifra para ufanarse o para que a los funcionarios públicos se les hinche el pecho de orgullo, tal y como lo hace el Secretario del Trabajo de Chiapas con la creciente tasa de desempleo.

Para el siguiente año, en el 2013, es decir durante el primer año de la presente administración del gobierno estatal, la Tasa de Víctimas por cada 100 mil habitantes, creció a 16,445, resultado que genera un crecimiento del 30% entre un año y otro.

Además de ese desmesurado crecimiento de la actividad delincuencial en la entidad, la Tasa de Víctimas de Chiapas ya no es la más baja del país, porque otras entidades como Oaxaca registra en el 2013 la tasa más baja a nivel nacional.

Entre 2012 y el 2013, la Tasa de Víctimas registra ascensos y descensos a nivel nacional. De las 32 entidades federativas del país, en 18 de ellas la Tasa de Víctimas descendió, mientras que en las 14 restantes ascendió.

Chiapas, desafortunadamente, se encuentra dentro de las entidades donde más se elevaron los niveles delincuenciales y, por lo tanto, registra una mayor cantidad de víctimas de la delincuencia. Es la entidad que mayor crecimiento porcentual registró a nivel nacional en esta materia.

Sin duda alguna, la pérdida de empleos permanentes que ha registrado la entidad chiapaneca, más de 6 mil en los últimos dos años, tiene un impacto directo en la elevación de la actividad delincuencial.

Mientras tanto, el Secretario del Trabajo se encuentra profundamente preocupado y ocupado en la promoción de su campaña electoral. Es lo único que le importa.

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