Por Guillermo Robles Ramírez

México es un país de incongruencias y sorpresas. Aquí, los que están dentro de la ley, es decir, los legales, los que cumplen con todo como buenos ciudadanos, son quienes siempre pagan los platos rotos. Ese es el costo por andar en orden y dentro de la ley.

Al ilegal se le protege y se le da impunidad, como tal es el caso de aquellos que no usan placas en su vehículo y no traen documentación, no se les molesta para nada ni se les dice nada, pero al legal, que porta placas y trae toda la documentación en regla de su coche, se le detiene constantemente en retenes y otros puntos, para exigirle que muestre la legalidad.

El legal, el cumplidor, acude a los módulos de verificación vehicular y paga lo que corresponde para estar dentro de la ley, pero al que no acude, nada se le dice ni exige. Al contrario, se le premia a la espera de una condonación de recargos a un peso o cualquier otro tipo de estímulo y mientras circulan sin la menor preocupación o mucho menos escondiéndose de los agentes de tránsito.

Los que tienen medidor para el agua potable en su domicilio, que hizo su contrato y puntual y cada mes paga el agua, en correspondencia o reciprocidad por ser cumplidor, con regularidad se le cambia el medidor y constantemente se le checa a ver si está pagando lo correcto, mientras que a los roba aguas o piratas o los que por años y años no han contratado su medidor, no se les dice nada.

A quienes pagamos puntualmente nuestras obligaciones fiscales o bien las cuotas del IMSS o el ISSSTE; jamás se les da un incentivo de cualquier tipo, ha, pero a los que dejan de hacer esos pagos durante años y años, se les quitan los intereses, recargos, moratorios y en ocasiones se les condonan algunos años de esas obligaciones “con el fin de que se pongan al corriente”.

Sin embargo, no solo sucede en ámbito ciudadano, sino también entre instituciones de gobierno, por ejemplo, Coahuila siempre envía los impuestos recaudados en tiempo y forma al gobierno federal, pero éste, no envía lo que nos toca de participación a los coahuilenses y mucho menos una proporción equitativa considerando que Coahuila está dentro de los primeros tres estados que mayor dinero de impuesto recauda. Incluso todavía existe dinero pendiente que le debe el gobierno federal a los coahuilenses del año 2018 y 2019. También se le ha castigo con la reducción de dinero cuando nuestra Entidad sigue enviando más dinero cada año.

Y que me dicen sobre los legales cuando usted es cliente de la Comisión Federal de Electricidad y tiene medidor y paga puntualmente su consumo, se le aumenta la tarifa de la energía eléctrica. Mientras tanto, seguirán sin pagar ni ser molestados los miles y miles de roba luz que con los llamados diablitos se cuelgan de cuanta línea eléctrica se encuentran a su paso.

Ahí están como ejemplo aquellos puestos improvisados de comida callejera como los taqueros, hamburgueseros, entre otros, que abren de noche y simplemente se cuelgan de un cable de las líneas de los postes de luz, y cuando son cuestionados simplemente responden que sí tienen permiso: ¿Pero de quién?.

También hay cientos de colonias de todo el país, incluyendo a Coahuila, que desde muchos años atrás, se roban la luz con diablitos y eso no es solo de la gente que no tiene dinero, sino de factorías y empresas múltiples de diversos ramos que se ahorran muchos miles de pesos robándose la energía eléctrica con la complicidad de la CFE, que nada dice ni hace.

Pero también sucede en el sector comercial en el primer cuadro de la ciudad en algunas cabeceras municipales de Coahuila, al que puedo mencionar en el caso particular de nuestro negocio de noticias que después de haber estado sobre la Avenida Victoria 217 por durante 29 años y cuando se decidió cambiar su dirección al sur de Saltillo, se tuvo que dar de baja el contrato de luz y por consiguiente se retiró los tres medidores, siendo por sorpresa que al mismo tiempo de su retiro se fue la luz a tres oficinas más que no pertenecían a la Agencia Noticias SIP, sino que fueron oficinas que se rentaron durante algunos años para los módulos de IFE (en aquel tiempo ahora INE). También recuerdo no tardó la misma CFE de reparar el daño, haciendo ellos mismo un “diablito”, de donde se encontraba nuestro medidor para alimentar a las otras oficinas, y diciendo los trabajadores de la Comisión Federal de Electricidad que eran órdenes de arriba, pregunte si ese de arriba se refería a Dios o a quién, pero ya no respondieron. Pero bueno, para eso están los legales, para que paguen por los ilegales. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México). www.intersip.org