Santiago de Chile, 28 may (PL) Queda Elpis, el espíritu de la esperanza, pero del resto la FIFA parece haber perdido sus papeles y la Caja de Pandora abierta promete difundir todos sus males.
Que no serán pocos.
Pretencioso sería ahora decir que se trata de la repetida crónica de la muerte anunciada, en préstamo permanente de la genialidad irrepetible de Gabriel García Márquez.
Pero el olfato hace rato que estaba contaminado de sospechas al interior de la archipoderosa Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA), si bien en la tranquilidad suiza de Zurich, seguía en su burbuja obnubilada por la nieve.
Alguien me decía tiempo atrás en París que la FIFA se comportaba como el gran mecenas del arte, sólo que en una dimensión mayor y aparentemente sin límites. «Un día va a explotar», advirtió premonitoriamente.
En Chile, como en toda Sudamérica, la noticia del escándalo no sólo estremeció a un área geográfica que respira fútbol, sino que la salpicó y de modo directo. Además de posibles directivos involucrados, está en el umbral de la Copa América.
La víspera, la Fiscal General de Estados Unidos, Loretta Lynch, estimó que los beneficios de los imputados ascendieron a alrededor de 150 millones de dólares y no descartó más arrestos por corrupción y sobornos.
Se trata de un prontuario delictivo construido a lo largo de más de 20 años y en verdad, no es asombroso. Patrocinios multimillonarios, costos de entradas a estadios y las codiciadas sedes de los eventos forman un apetecible pastel.
Aunque directamente Chile no tiene nada que ver con las investigaciones en curso a 14 sospechosos, entre ellos altos funcionarios latinoamericanos y caribeños, la Copa América se antoja más visible que nunca.
La UEFA que dirige Michel Platini alzó su voz de forma amenazante de cara a las elecciones de mañana de la FIFA, en las cuales un inmutable Joseph Blatter, de 79 años, pretende reelegirse.
Como Platini, carismático jugador francés de antaño, otras figuras del pasado como el argentino Diego Maradona, el brasileño Romario y el paraguayo José Luis Chilavert se atrevieron a cuestionar a Blatter.
-Conexión Qatar-
El otorgamiento de la sede de la Copa Mundial de 2022 a Qatar fue la punta del iceberg de lo que ahora parece adquirir dimensiones mayúsculas. El mandamás de la FIFA no puede negar que varias veces se habló del tema con alarma.
En corrillos deportivos los dedos acusadores se levantaron con obstinación con la afirmación implícita que lo de Qatar rebasaba la imaginación. Sin embargo, a todas luces las billeteras del emirato árabe fueron generosas.
Se habla de 100 mil millones de dólares como promedio en la construcción de estadios ultramodernos y unos 50 mil millones destinados a la remodelación de los existentes.
No se menciona el «lobby» del pequeño país árabe para obtener la sede de la cita del orbe, aunque para ser honestos, las campañas en este sentido no se diferencian mucho con las candidaturas de Juegos Olímpicos y otros.
De hecho el Comité Olímpico Internacional (COI), con su cuartel general también en la apacible Suiza, en Lausana, también tiene sus pecadillos, como el dislate de otorgar a Atlanta la cita de 1996 cuando debió ser Atenas.
Centenario de los Juegos Olímpicos nacidos en la capital griega, diferidos a la urbe sureña estadounidense, curiosamente donde se afincan Coca-Cola, el gigante telefónico ATT y la aerolínea Delta Airlines.
El máximo directivo del fútbol chileno, Sergio Jadue, se desmarcó del escándalo de corrupción de la FIFA, al tiempo que negó haber recibido sobornos por entregar los derechos de televisión para la Copa América-2015.
De todas formas, su rostro seguirá en el candelero con la cita del balompié continental en ocho ciudades chilenas del 11 de junio al 4 de julio venideros. Ya la confederación sudamericana también en la mira.
En síntesis, la Caja de Pandora de la FIFA promete nuevas emociones y aunque Blatter se perpetúe en el cargo, o lo haga su contrincante el príncipe Alí de Jordania, será imprescindible una limpieza total.
Qatar está más cuestionada que nunca, también se abren dudas sobre Rusia 2018 y en río revuelto, ya se levantaron voces para ponderar a Estados Unidos como sede alternativa.
Sospechoso. Será cosa de ver hasta que profundidad desean llegar las investigaciones. Me temo que si avanzan bastante, rodarán muchas cabezas en la FIFA y en el entramado de patrocinios de citas deportivas.