La Habana (PL).- Primera mujer en la historia del deporte mexicano que ganó una medalla olímpica, Ana Gabriela Guevara, especialista de los 400 y 800 metros lisos del atletismo, dejó una estela ganadora en las pistas de los Juegos Centroamericanos y del Caribe.
La estelar velocista,  nacida el 4 de marzo de 1977 en Nogales, Sonora, marcó una intensa temporada ganadora en la primera mitad de la primera década del presente siglo con triunfos que le ubicaron en un lugar destacado en el deporte del campo y la pista.
En el 2002 protagonizó una de las temporadas más formidables para una corredora de 400 metros en la historia del atletismo mundial. No perdió ninguna de las carreras en las que participó, y ganó las 12 finales cumbres en las que intervino.
Las siete competencias de la Liga Dorada, la Copa del Mundo de Madrid, la final del Grand Prix de París y los Juegos Centroamericanos y del Caribe de El Salvador-2002, en los que rompió el récord regional de los 400 metros con tiempo de 49.12 segundos, que la ubican oncena entre las mujeres más rápidas en la vuelta al óvalo.
Su primer año de gloria mundial fue en el 2003 al consagrarse campeona en el Mundial de París, cita en la que ganó los 400 metros planos en 48:89 segundos, su mejor tiempo hasta ese momento para convertirse en un hito del  atletismo mexicano porque ninguna mujer de su nacionalidad había logrado tan importante resultado.
En casi seis años de trayectoria logró consolidarse como la mejor exponente de la vuelta al óvalo en la clasificación de la Asociación Internacional de Federaciones Atléticas (IAAF), superando a competidoras con muchos más años corriendo la distancia.    Por tal hazaña atlética la prensa latinoamericana la escogió como la Mejor Atleta del Año en la tradicional encuesta deportiva que organiza cada año la agencia de noticias Prensa Latina desde 1964.
Su andadura en Juegos Centroamericano y del Caribe comenzó en la justa de Maracaibo, Venezuela, en  1998, cuando se agenció las medallas de plata en los 400 y 800 metros planos, detrás de jamaicana Sandie Richards, en la primera prueba, y de la surinamesa Leticia Vriesde, en la segunda. Fue un aviso de los que vendría después.
Su gran momento en las justas multideportivas bajo la bandera de Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe sonó en la cita de San Salvador, El Salvador, en el 2002,  al computar dos medallas de oro en la vuelta al óvalo y en el relevo 4X400.
Cuatro años después, en la justa de Cartagena de Indias, Colombia, Guevara  primó en esas dos pruebas para consolidarse como una de las mejores corredoras de ambas distancias en la región y en el mundo.
En los Juegos Olímpicos de Atenas-2004, Guevara, abanderada de la delegacion de su país, se convirtió en la primera mujer en la historia de México que conquista una medalla olímpica en los 400 metros lisos, al ganar el metal plateado con crono de 49.56 segundos, justo un año después de haberse proclamado campeona mundial.
Su primera gran victoria fue el oro que obtuvo en los 400m en los Juegos Panamericanos de Winnipeg, Canadá en 1999. Un año después clasificó para los Juegos Olímpicos de Sydney-2000 en los que alcanzó la gran final, y en ella terminó en un razonable quinto lugar con tiempo de 49.96 segundos.
Después de ese evento, dibujó una estela de 28 triunfos consecutivos antes de lograr un segundo lugar en la Liga Dorada de Roma en julio de 2004.
También en el 2003, defendió su título en los 400m en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo. Semanas más tarde, el 27 de agosto, en París, Francia, ganó el cetro en la Liga Dorada en igual evento, su especialidad.
En esa carrera, implantó su mejor marca personal, que se registró a su vez como récord para México y en ese momento la mejor marca del año,  cuando cronometró 48.89 segundos. Ese tiempo, se mantuvo por años como el mejor noveno crono en la historia de esta disciplina.