Ahora que las campañas electorales del proceso federal han concluido, y que la administración estatal en Quintana Roo y sus diez municipios entrarán en su recta final, para renovarse en 2016, cabe tener presentes los retos que aun se tienen en la entidad con respecto a la pobreza, pues mientras la actividad turística es un éxito, el beneficio para todos sus habitantes es aún una deuda pendiente, pues la disparidad entre sus municipios es tal, que la pobreza en algunos de ellos casi duplica el promedio nacional, de acuerdo a los informes que las mismas dependencias federales han reportado en 2014 y 2015.

La pobreza en los municipios quintanarroenses es bastante marcada, el Informe Anual de la situación de pobreza y rezago social de las entidades y sus respectivos municipios así lo reveló en 2014 y datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) dieron a conocer a principios de 2015, que el 25 por ciento de la población estatal viven en condiciones de pobreza o pobreza extrema, situación que incluso ha sido reconocida por el mismo secretario de Desarrollo Social e Indígena de Quintana Roo, Ángel Rivero Palomo.

El funcionario dijo al periódico La Jornada, a principios de año que ”de un total de millón 490 mil 711 quintanarroenses, 400 mil son pobres y de éstos 120 mil viven en pobreza extrema, es decir, ‘no tienen acceso a comida ni a los medios necesarios para subsistir, principalmente en la zona rural de Bacalar.’”

En los indicadores generales Quintana Roo crece continuamente, la generación de divisas por turismo es creciente, el incremento de visitantes y la ampliación de oferta turística han colocado a la entidad como la más exitosa del ramo en todo México; sin embargo, cuando se analizan los municipios en lo particular, el desarrollo es absolutamente dispar, pues Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos y Lázaro Cárdenas tienen porcentajes de pobreza superiores al 70 por ciento, cuando a nivel nacional es de 45.5.

Estos datos de 2014 prácticamente han permanecido sin modificación en 2015. Tulum e Isla Mujeres están dentro del rango “promedio” de pobreza nacional, con 47.9% y 45.2%, respectivamente. De hecho sólo 4 de ellos están por debajo de la media: Othón P. Blanco (que para efectos de las mediciones hechas, aun se le incluyó al municipio Bacalar) con 42.9 por ciento; Cozumel con 31.7; Solidaridad con 30.3 y Benito Juárez con 26.3 por ciento.

Luego entonces, es evidente que ni el éxito turístico, ni la mejora constante se refleja en las comunidades indígenas, pues los municipios con mayor pobreza, son también el corazón de la llamada “zona maya”; además de que el éxito turístico de Tulum e Isla Mujeres tampoco ha traído suficiente bienestar a quienes ahí habitan. El resto de los municipios han cumplido mejor, destaca Benito Juárez con los mejores indicadores estatales.

A propósito de las futuras elecciones y las promesas que escucharemos para los comicios locales en 2016, la situación de pobreza no se ha modificado con ninguno de los partidos políticos que han ocupado presidencias municipales en Quintana Roo; y entonces no es cuestión de partidos, sino de capacidades de gobernar; se trata de formación para hacerlo, de contar con proyecto de gobierno. Y solamente así, por cierto, se construye una agenda pública que atiendan los gobiernos en turno.

De seguir así, el éxito estatal no será nunca compartido por los ciudadanos. Sin capacidad para gobernar los municipios y sin involucramiento social, los indicadores no se verán reflejados en servicios públicos dignos; y platos de comida llenos, los retos por delante están bastante claros para la entidad, esperemos que así les parezca a los futuros gobernantes, porque así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.

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