Para progresar no basta actuar,
hay que saber en qué sentido actuar
Gustave Le Bon

Por Julian Santiesteban

Lapidario, aunque políticamente correcto, fue el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, al referirse en esos términos al gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador; y aunque su declaración la circunscribió a la falta de recursos en la promoción turística, la frase “nos han dejado solos” puede aplicarse indudablemente a muchos otros ámbitos y entidades de la República.

Porque hace apenas dos semanas, el titular de Seguridad en Quintana Roo, Alberto Capella Ibarra, reveló que en diciembre de 2018, el setenta por ciento de los elementos militares que llegaron al estado para reforzar las tareas de seguridad, simplemente se fueron, los reubicaron a otras entidades, cuando en Quintana Roo se dispuso de un terreno y se invirtieron 800 millones de pesos para la construcción de la llamada “ciudad militar” que serviría ex profeso para albergar a los elementos y sus familias, las instancias educativas ya preparaban la construcción de escuelas en ese sitio y las de salud ya les brindaban el servicio, pero aun así “nos han dejado solos.”

En materia turística, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador se comprometió a radicar la Secretaría de Turismo (Sectur) en Chetumal –por cierto, el plazo para que ello ocurra vence a finales de la presente semana-, pero la llegada de la dependencia no resuelve por sí misma los problemas en el sector, pues Quintana Roo sigue siendo el principal centro turístico de Latinoamérica, pero como es sabido, la administración de la cuarta transformación republicana eliminó los recursos de promoción, como eliminó también los destinados a los Pueblos Mágicos del país (la entidad cuenta con tres municipios con esta denominación y tres más en espera), y hasta ahora; el titular del ramo, Miguel Torruco Marqués, ni ha llegado a Chetumal, ni ha explicado al Senado de la República cómo compensará los recursos para pueblos mágicos. “Nos han dejado solos” pues.

Por cierto, apenas este viernes, el titular de Seguridad Pública de México, Alfonso Durazo Montaño –ahora tan popular por la recién estrenada serie de Colosio y desde ahora candidateable para ser gobernador de Sonora en 2021- afirmó que las diferencias políticas han dificultado la coordinación en materia de seguridad entre los diferentes órdenes de gobierno, a la vez que criticó fuertemente a las corporaciones policiales municipales por su falta de capacitación y estar infiltradas por la criminalidad. Luego entonces, debiera comenzarse por “la casa”, en Quintana Roo, los gobiernos morenistas son los que se han resistido a esa coordinación y mando unificado, argumentando estar “alineados” con las políticas nacionales, “han dejado solo” al gobierno estatal, “quedándose a la vez solos” en el combate a la criminalidad en sus demarcaciones.

Y en otras latitudes y temas es lo mismo, sólo para ejemplificar y cambiar de región, el presidente municipal de Tijuana –en el extremo norte del país-, Juan Manuel Gastélum, aseveró apenas ayer sábado que, en el tema de los migrantes centroamericanos a los que el gobierno federal prometió protección y apoyo, “el gobierno de Andrés Manuel López Obrador nos ha dejado solos con los problemas de la frontera”, y así se han expresado antes en el estado de Guerrero… están solos.

Ciertamente, el abandono por parte de los gobiernos federales no es reciente, como en el estado de Quintana Roo la complacencia de regímenes anteriores con la delincuencia también fue permanente, pero no se trata de ir de abandono en abandono, se trataba pues de una cuarta transformación republicana ¿o no?

COMENTARIO MORBOSO

A tres semanas de que comiencen las campañas políticas para la renovación del Congreso local, las listas de candidatos han quedado definidas, será en este periodo que los temas a destacarse se conozcan, pero los que hasta ahora han trascendido tiene que ver más con críticas que con propuestas para la transformación social y lograr el desarrollo que por décadas ha demandado la entidad.

Por ejemplo, entre los integrantes de la coalición Morena-PT-PVE comentan “por lo bajito” que el eje central de la campaña será seguir prometiendo una cuarta transformación republicana y criticar la ausencia del “cambio” prometido por la administración estatal local, pero de temas en concreto nada se sabe. Discurso nomás.

En contraparte, integrantes de la coalición PAN-PRD-PES afirman que gran parte de la estrategia será seguir bajando la popularidad del gobierno federal, del presidente López Obrador y destacando “la decepción” que han representado los gobiernos municipales morenistas como el de Othón P. Blanco, Benito Juárez y Solidaridad.

Ambas coaliciones pueden tener razón, pero ¿y la propuesta? Ahora bien, el ciudadano debe en este proceso tener oídos más que aguzados, pues luego de la elección, tanto los morenos como los albiazules y hasta los del PRI pretenden construir mayoría legislativa; es decir, que las cachetadas son fuertes, pero de mentirita. Acaso Movimiento Ciudadano será la única oposición –si alcanza alguna curul- en la XVI legislatura, ¿o ya alcanzando diputaciones todo será cuestión de negociar? No olvide el lector, en cuestión de políticos, no hay mucha diferencia cuando se alcanza el acceso a las arcas, ya lo verá después de septiembre del presente año, cuando tomen protesta los futuros legisladores; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima.