Me sentaré en la puerta de mi casa a ver  

pasar el cadáver de mi enemigo 

 Proverbio Árabe

Por Julian Santiesteban 

Faltan 23 días para que se aprueben las candidaturas por la gubernatura de Quintana Roo y el nivel de confrontación interna en Morena ha cedido apenas un poco; ya no hay riesgo de rupturas, no habrá escisiones partidistas, ciertamente, pero ello no garantiza que los aspirantes no favorecidos vayan a trabajar en favor de la alcaldesa de Benito Juárez, Mara Lezama Espinosa. A esta circunstancia se suma un factor que parece intrascendente, pero en el estado resulta fundamental: las redes sociales se han convertido en depositarias y distribuidoras de mensajes que lo mismo lanzan señales de guerra soterrada, que de acuerdos incumplidos. Así, a 63 días de que inicien las campañas, es más lo que se dice con silencios. 

Con el escenario descrito, pareciera que, lo más que se ha logrado hasta ahora, es tan sólo que los no seleccionados “se sienten” a ver la confrontación de los candidatos, pero eso no es suficiente en una competencia que se advierte cerrada y a tres grupos: el de Morena y sus aliados, el del “panrredismo”, con Laura Fernández Piña; y el tercero, de Movimiento Ciudadano, con Roberto Palazuelos badeaux. En esta circunstancia, lo que los grupos no favorecidos hagan o dejen de hacer, incide directamente en el éxito de los y las abanderadas; probablemente en el PAN o PRD no sea significativo, pues su militancia es reducida y el desgaste natural del ejercicio del gobierno hace que el “voto duro” se mantenga, independientemente de la virtual seleccionada, Laura Fernández Piña; pero esta última, sin duda apuesta a restar votos a Morena, a partir de la inconformidad que se mantiene al interior, además de lo que pueda acumular de su pasado por el Partido Revolucionario Institucional (PRI), cuya virtual candidata, Leslie Hendricks Rubio, tampoco parece haber dejado conformes a los pocos tricolores que permanecen fieles al partido. 

¿Y entones qué sector del electorado busca Roberto Palazuelos? En promedio, la participación electoral no supera el 45 por ciento en lo local, eso significa que el abstencionista es la proporción más elevada del padrón electoral, pertenecen a este grupo, lo mismo ciudadanos hartos de que la clase política sea igual, independientemente de los colores partidistas, que aquellos que no se interesan en política por alguna circunstancia diferente. Ser “famoso” y no haber estado en cargos públicos, se “vende” ahora como si fuera sinónimo de ser “mejor”, aunque el postulado haya mostrado hasta ahora profundo desconocimiento de la problemática local. Repite dos o tres temas en materia ambiental, promete solución a fenómenos evidentes como la inseguridad o el desempleo, la falta de promoción, pero apenas se le cuestiona por alguna cuestión de fondo, afloran las fallas discursivas. El político no tiene que ser experto en todo, pero sí debe rodearse de un equipo que lo sea, hasta ahora, es la falla más evidente, además del pasado y discurso de “mirrey”, con rasgos de prepotencia y misoginia. Aun así, el ser personaje de televisión, algún beneficio brinda entre el electorado menos crítico. 

Pero volviendo a Morena, a finales de la semana anterior, la senadora Marybel Villegas Canché, aseguró al escribiente que, efectivamente, hubo una reunión convocada por el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, en la que se hicieron acuerdos para su permanencia en Morena, básicamente que tienen que ver con cederle espacios y candidaturas en el Poder Legislativo, compromisos que, asegura, no se han cumplido, ante lo cual, sumarse a la candidatura de Mara Lezama no ha ocurrido. Lo mismo se advierte con el senador José Luis Pech Várguez, que ha difundido mensajes en sus redes, en los que asegura que la lucha continúa, como si la candidatura guinda aun pudiera ser modificada, y, por último, el hasta ahora “desaparecido” Luis Alegre Salazar, se ha replegado a tal grado que de política no ha vuelto a hablar. Conocer el grado de afectación a la campaña y el resultado es incierto, pero sin duda, no es algo en lo que debiera correrse el riesgo, pues la participación “pasiva”, aquella en la que no se hace nada, pero se deja pasar todo, es sin duda peligrosa para la Cuarta Transformación Republicana (4T). Más aún lo es la posibilidad de que se apoye “por lo bajito” a candidaturas de otros partidos y coaliciones. El resultado del 06 de junio de 2021 en la Ciudad de México, donde se acusó al coordinador de los senadores “morenos”, Ricardo Monreal Ávila, de apoyar al PAN, es la muestra más evidente. Ahí, Morena perdió la mitad de las alcaldías. La advertencia está hecha; así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. Nos leemos en la próxima. 

Pd. No olvidar que las redes sociales son el medio principal, a través de los cuales los quintanarroenses se informan sobre sucesos políticos. En ese mundo virtual, la lucha continúa, aunque en el discurso tradicional se asuman las candidaturas como cosa consumada. Esto es válido para todos los partidos y coaliciones. No debe, en consecuencia, asumirse el tema con desdén. 

COMENTARIO MORBOSO 

La semana anterior, en Playa del Carmen, fue asesinado Federico Mazzoni, gerente del club Playa Mamitas, propiedad del empresario, Jorge Marzuca Fuentes, quien ha denunciado a su vez a Jorge Brizuela Guevara, por el impago por diversos contratos obtenidos con la Secretaría de Salud de Quintana Roo, para la instalación de las llamadas Carpas Covid, en diferentes municipios del estado. 

Ante el nivel de confrontación del llamado “Venezolano” con Marzuca Fuentes, Víctor Salas y Omar Macías -los otros empresarios que hasta ahora han sido defraudados con varias decenas de millones de pesos-, pero además los señalamientos de los familiares del asesinado, en el sentido de que la ejecución estaría relacionada con el señalamiento público del adeudo y fraude, Brizuela Guevara, en un intento de deslinde, anunció para el viernes pasado una rueda de prensa en la ciudad de México que canceló de forma súbita, no sin antes revelar, en una entrevista con un medio nacional, que él no estaba siendo investigado y que, además, ya había detenidos por el asesinato. Esta información, sin embargo, la hizo pública incluso antes que las autoridades de Quintana Roo la difundieran. Ofreció al periodista Ciro Gómez Leyva proporcionar el expediente para ratificar su dicho. Nótese pues el nivel de involucramiento del señalado, solamente por decir algo, con el fiscal general Óscar Montes de Oca Rosales. Da información privilegiada, que debiera manejarse con secrecía, de una investigación de la que asegura no ser parte ¿entonces cómo obtuvo la información y el expediente, si no es de forma irregular? Más que aclarar, se enredó mucho más, pero además involucró, ahora sí, a autoridades locales en esa torpeza. 

Por lo anterior, los afectados enviaron justamente al fiscal Montes de Oca Rosales, una misiva en la que señalan la responsabilidad de autoridades locales –responsabilidad por omisión, señalan a la secretaria de Salud quintanarroense, Alejandra Aguirre Crespo, y su administradora, Elvia Aguillón-, por permitir el impago y que la situación se postergue de la manera que ha ocurrido. De la misiva, el escribiente tiene copia y, más allá de si Brizuela Guevara tuvo o no responsabilidad, o si está siendo o no investigado y, en suma, si sus relaciones personales le permiten la aparente impunidad con que procede; lo innegable es que hay empresarios que han solicitado ayuda públicamente, advertido de la gravedad ya de la situación y mostrado los adeudos que existen. 

Por cierto, el “empresario” Brizuela Guevara estuvo en el pabellón del Caribe Mexicano, promocionando “su” empresa de pruebas rápidas de Covid, dijo, buscando alianzas con otros países. Qué bueno es tener relaciones tan estrechas que hacen florecer los negocios personales… porque sí son personales ¿o no? Así se observa desde aquí, A Tiro de Piedra. 

Pd. Aquí también la advertencia sobre la seguridad de los empresarios está hecha, para que no ocurran más lamentables “hechos aislados.” 

Pd2. La postura del gobierno estatal, según adelantó el periodista Gómez Leyva, es que el tema es un diferendo entre particulares. Ándele pues.