¿Realmente desquitan el sueldo?

Por Guillermo Robles Ramírez

Anteriormente, los diputados locales en Coahuila, estaban compuestos por 35 curules, allá por el año 2007; en ese año hubo una iniciativa para hacer una reducción a 30 o menos. En la actualidad están compuestos por 25 diputados.

Todo esto bajo la presión de distintos sectores de la sociedad, que criticaron duramente lo mucho que ganaban esos “representantes del pueblo”, ya que 16 años atrás se les destinaba no menos de 4 millones de pesos al año. Mucho se decía que ganaban mucho y hacían poco.

En promedio, a los coahuilenses les cuesta sus diputadas y diputados un promedio de 8.9 millones de pesos cada uno, en el presente año, siendo la mayor el pago de sueldo, el mayor porcentaje de recurso destinado, al menos esto es lo que sostiene el IMCO.

¿A dónde va todo esto?, el tema interesante es si realmente fue positivo la reducción de diputadas y diputados, en el Congreso del Estado de Coahuila; en la eficiencia y productividad, ya que no por ser muchos o pocos, sería mejor su desempeño. Y el tiempo ha dado la razón, en donde al menos la percepción de muchos coahuilenses opina que siguen siendo igual de “despistados”, poco apáticos o muestran poca empatía.

La idea del asunto es que no importa el número, pero que demuestren iniciativas en asuntos legislativos y trabajo que reditúe algo positivo para la comunidad en general.

El sentir de muchos coahuilenses es que utilizan esos puestos como punteros publicitarios, para hacerse notar con iniciativas que no reditúan o no se beneficia una mayoría, sino que solamente sacan puntos de acuerdo según la tendencia social, pero que al momento de la práctica es poco o nada la aportación.

Las críticas e inconformidades de la sociedad no son gratuitas, nuestras diputadas y diputados, se los han ganado a pulso. Si es que, están trabajando bien y bastante para lo que ganan de salario, bonos, apoyos parlamentarios y otras canonjías, la comunidad no lo sabe por falta de información o deficiencia en cómo bajar y hacer llegar esa información.

Debe de verse desde el punto de vista cualitativa y no cuantitativa, es decir, continua el cuestionamiento si son necesario los 25 curules locales, y exigir que rindan de acuerdo con el sueldo que perciben, sin embargo; hasta el momento no hay nadie que diga que es poco lo mensual que se paga a estas señoras y señores, pero tampoco se dice si se está haciendo una labor con eficacia, o un gran peso que beneficie a los coahuilenses.

Siempre he sostenido que a México, lo que sobra son las leyes y las normas, es más, nuestro país tiene muchas que ni siquiera otros países; sin embargo, la deficiencia es que continúan reinventando el hilo negro, y así como tampoco asignan un presupuesto para hacer cumplir las leyes que ya existen en la actualidad. En resumen, no hay quién haga cumplir las leyes, reglamentos o normas que continúan reinventando, y menos las pocas nuevas que van sacando.

También hay que reconocer que hay diputadas y diputados que sí desquitan lo que reciben de sueldos, pero son contados. Se justifique o no lo que ganan de sueldo, lo cierto es que hay 16 de elección mayoritaria, es decir, aquellos que ganaron la curul por el voto depositado en las urnas y 9 plurinominales que son de los esquemas “modernos”, pero incomprendidos porque se ha querido compensar o quedar bien con partidos políticos que sacan pocos votos en una elección constitucional haciendo cuentas de sumas, restas y divisiones que nomás los políticos entienden. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México, Presea Trayectoria Humberto Gaona Silva 2023) www.intersip.org

Deja un comentario