¿Quién las regula?

Por Guillermo Robles Ramírez
Ha pasado en Coahuila en diferentes tramos de las carreteras que conectan las 38 cabeceras coahuilenses, aunque también ha sucedido lo mismo en el Estado de Nuevo León, San Luis Potosí, y así en diferentes partes a lo largo y ancho de la república mexicana.

Y me refiero a esas “empresas”, que ofrecen y realizan viajes turísticos a diferentes partes del país. Algunas de esas negociaciones dan el servicio completo desde alojamiento, comidas, visita a los lugares turísticos y el traslado y las hay que van y vienen el mismo día como los ya muy conocidos transportes que salen de las diferentes regiones de México.

Qué bueno que existan estas empresas “turísticas” si lo vemos desde el punto de vista positivo y noble, pues generan empleos y consecuentemente economía, ya que cada salida requiere de consumo de combustible, contratación de chofer, compra de alimentos, ocupación de alojamiento, etc.

La pregunta es, ¿quién o quiénes los reglamentan?, es decir, hay alguna normativa, así como una autoridad que no solo figure como nombre en alguna parte del reglamento o ley, sino que sea efectivo la supervisión en físico, así como también en campo de trabajo y no detrás de un escritorio.

Y si alguien me llegara a comentar que sí existe, autoridad para este tipo de negocios; entonces me pregunto: ¿Por qué tantos accidentes?

Hay testimonios periodísticos como el sucedido al inicio del presente mes en San Luis Potosí, un accidente de un autobús de turismo teniendo como resultado cuatro personas muertas y veinte heridos. Mismo mes y año en donde once personas fallecidas, veintidós lesionados en el municipio de Hualahuises, Nuevo León. En el mes de abril presente año, fueron tres muertos y quince lesionados otro de estos camiones turísticos, pero en la carretera Matehuala-Saltillo. Se puede continuar la lista, pero no solamente ha sucedido en el año 2025, sino también en el pasado; siendo uno de los más sonados en el año 2009 en la carretera Saltillo-Zacatecas, con saldo de un muerto y tres decenas de lesionados de la “empresa turística” de Jac Tours. Las víctimas eran residentes de Saltillo y Ramos Arizpe.

Hay quienes se pueden cuestionar si se trata de algún tipo de fraude para quienes confían en esas “empresas turísticas”, que en muchos de los casos, trabajan con las uñas, utilizan unidades en mal estado mecánico, no cumplen y se cometen infinidad de abusos para el consumidor que confía en que tendrá una grata excursión o viaje turístico. Y todo al juzgar el mal estado de las unidades por lo viejo que se ven en fotografías de cada uno de los lamentables accidentes en donde las investigaciones por alguna razón quedan sin resolver.

En algunas ocasiones solo son los camiones turísticos que pierden el control o alguna falla mecánica son quienes sufren el accidente, sin embargo, hay ocasiones en donde se ven involucrados vehículos de otros particulares en donde viajaban familias o bien personas trasladándose a otros lugares por cuestiones de trabajo, negocio o placer. Y lamentablemente también son víctimas de estos accidentes que no pasan de un incidente involuntario para no catalogarlo de imprudencia o negligencia por no respetar algún reglamento o normativa, reiterando en el caso de que exista alguno, así como de la autoridad quien debe de estar vigilando con sentido responsable las condiciones mecánicas y reglamentaria de estos “negocios turísticos”.

Además para quienes contratan y confían su vida a estos negocios, no es suficiente que se les haga mención que cuentan con un seguro de accidente, puesto que se ha dado en muchos de los casos que al momento de reclamar a la aseguradora responsable por algún motivo la compañía de seguro encuentra algún incumplimiento o falta de cobertura bajo ciertas condiciones para no pagar lo contratado a los consumidores los daños materiales, hospitalarios, o la pérdida de vida de algún familiar quienes utilizaron los servicios de los camiones turísticos. Y aunque no se está generalizando, sí hay que hacer mención que existe un porcentaje muy alto de incumplimiento y responsabilidad por parte de los dueños de este giro comercial turístico.

Insistimos: Quién reglamenta y vigila a estas empresas patito dizque de turismo. Ante el cada vez mayor número de esos negocios, es conveniente que las autoridades establezcan normativas no solo para amparar con un seguro contra accidentes a sus clientes ni tampoco para que se cumpla cabalmente lo que cobra y promete, sino para la minuciosa revisión de los autobuses y más tratándose de unidades viejas, que se utilice en esos viajes de descanso y vacaciones que terminan en algún hospital.  Al menos es lo mínimo que pide la comunidad. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México, Presea Trayectoria Humberto Gaona Silva 2023) www.intersip.org

Deja un comentario