Por Alan Prado

«Escoger un camino implica renunciar a otros, si intentas transitar todos los caminos posibles terminarás por no caminar ninguno».

Dejar el pasado atrás es tener el valor de transitar con dolor, pero sin miedo, nuestro camino, a veces salpicado de lágrimas, porque, además del temor a la soledad, de las personas que uno pierde, hay circunstancias que cambian, hay lazos que se transforman, hay fases en la propia vida que quedan atrás, y cada uno de ellos representa una pérdida que debemos empezar a aceptar. 

Si somos capaces de asumir estas realidades como parte de la vida, aprenderemos a reconocer que una de nuestras responsabilidades es aprender a enriquecernos con las despedidas. 

Todas las vivencias de nuestra vida conllevan una pérdida, pero no podemos olvidar que gracias a haber perdido ciertas cosas hemos ganado otras.

Gracias a eso, somos las personas que somos HOY. Cuanto mejor puedas conocer quién eres, más capaz serás de dejar algo de forma voluntaria y dolorosa para dar espacio a lo nuevo que se anhela. Que sea un día para despojarnos de todo el pasado y llenarnos con lo que nos ofrece el presente y entender que si nuestro antiguo camino no nos ha conducido a ningún lugar es momento de iniciar la búsqueda de uno nuevo. 

《La verdadera locura es tan poco común como la verdadera sabiduría. Tal vez no sea más que la sabiduría en sí misma que, harta de revelar las vergüenzas del mundo, ha decidido inteligentemente volverse loca》.

Al mundo no le interesan tus emociones. En realidad, al mundo no le importas. Lo que verdaderamente cuenta es cómo manejas lo que te ha tocado. Si pasas tu vida llorando por tus carencias y albergas rencores por lo poco que piensas ser, acabarás siendo consumido y vencido por aquellos que crees que son superiores a ti.

El mundo no tiene preferencias, es frío y no le afecta quién gana o pierde. El universo no conspira ni a tu favor ni en tu contra, te es completamente indiferente.

《Mientras aun exista vida debes escuchar una cosa, se debe luchar siempre por la justicia y nunca por la maldad, la verdad del universo es que nada es seguro, no hay justicia perfecta ni maldad perfecta, puedes hacer justicia desde la maldad, y según veo la vida es justicia》.

«Que esperas gran guerrero, ve por esa victoria anhelada».

Alan Prado (AMEP 11:11).