Por Guillermo Robles Ramírez

El presidente de la culpa, y la división en México; es decir, el caudillo de López Obrador, continúa manipulando a las mentes jóvenes haciéndoles creer que el presupuesto de las universidades públicas es ajeno a la federación, al incitar a la violencia a los universitarios del país asegurando que existen “mafias y caciques en universidades públicas”, y que por lo tanto no puede intervenir en el presupuesto, así que la única manera es creando movimientos estudiantiles y/o universitarios.

Considero que hay que ser demasiado ingenuo o estúpido, el creer que la autonomía de una universidad pública radica en las finanzas que solamente el gobierno federal tiene acceso y que además de ello no existe una transparencia del mismo recurso.

La autonomía de cualquier universidad pública, radica principalmente en la planeación de estudios, el resguardo y mantenimiento de los bienes inmuebles, así como el mismo mobiliario.

Se le considera universidad pública, desde el momento que recibe dinero del gobierno federal y estatal para hacerlo operacional, infraestructura y evidentemente el pago del personal, así como de pensionados. En este mismo apartado todo recurso financiero está debidamente etiquetado tanto por la federación y estado, en donde la rendición de cuentas este hecho ante el SAT, para asegurar su transparencia. Y en el caso de los coahuilenses existe la revisión realizada por la Auditoria Superior del Estado de Coahuila (ASEC), y más en particular en la Universidad Autónoma de Coahuila, hay auditorias externas quienes hacen posible la transparencia de las finanzas.

El provocador siempre mentirá, llorará y se victimizará para salirse con la suya sin importar a quien se lleve entre los pies, como lo fue Adolf Hitler.

Pero también dentro de rubro económico de las universidades públicas, incluyendo a la UAdeC, la participación del ingreso de los dineros del gobierno federal y estatal son por porcentajes, es decir, una parte la pone la 4T y la otra las finanzas estatales. Aunque en esta parte hay que ser muy sincero que el gobierno lopezobradorista tiene sus universidades públicas favoritas a las que les destina mayor porcentaje que al de Coahuila, por decir mientras que universidades públicas reciben hasta el 87 por ciento de su presupuesto federal; la UAdeC, no recibe ni siquiera la mitad del recurso federal, sino que es el Gobierno de Coahuila, quien pone casi todo el recurso representando una mayor carga a las finanzas del Estado.

Además, en los últimos tres años, el atraso del dinero de López Obrador, a la Universidad Autónoma de Coahuila, ha ido aumentando, teniendo un adeudo con la máxima casa de estudios en la Entidad, de hasta más de dos años. Pero eso sí siempre condiciona la promesa de entregar el recurso tan pronto el Gobierno del Estado envíe su participación, algo que siempre Riquelme Solís, cumple en tiempo y forma, quedando pendiente la participación federal.

Para mi es muy claro, al “Peje”, no le gusta estudiar o que alguien le supere intelectualmente, y prefiriendo boicotear la preparación de millones de estudiantes.

Tenemos varios ejemplos que puede hacer suponer lo anterior, como lo es en Coahuila.  Las escuelas federales de educación básica continúan esperando el dinero de la federación para reparar los daños (vandalismo) causados por el confinamiento del Covid-19, así como tampoco ha llegado el dinero para condicionarlas con lo mínimo necesario para las clases presenciales y prevenir el contagio del Coronavirus.

Los alumnos de nivel básico de Coahuila tienen un rezago mayor del 20% en las materias de español y matemáticas de acuerdo al diagnostico del Sistema de Alerta Temprana, aunado al incremento de obesidad de los mismos estudiantes durante la pandemia y la transmisión de la educación en línea y/o televisión.

En el mes pasado la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico lanzó una alerta para México, sobre la desigualdad existente en el tema de educación ya que aumentó la tasa de alumnos no inscritos, es decir, la deserción de la educación considerando a nuestro país la tasa más alta de un grupo de 38 países en donde evidentemente México se encuentra dentro de ese listado.

Probablemente una deserción influenciada por comentarios hechos por AMLO, como “aspiracionistas, egoístas y que quieren triunfar a toda costa….licenciatura, con maestría, con doctorado, ¡no!, está muy difícil de convencer”.

Un mensaje muy desmotivador para un estudiante de cualquier nivel, es decir, básico, medio y/o profesional, para dejar de estudiar o prepararse, a fin y al cabo, papá gobierno mantiene con el dinero del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, es decir, sale más barato al gobierno de la 4T mantener a un “nini” que enviar dinero y cumplir con el recurso a las escuelas y universidades públicas. Acciones como esta cualquier puede pensar que el único deseo del Ejecutivo es el cerrar las instituciones educativas pública.  (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org