El tiempo, buen aliado

Por Guillermo Robles Ramírez

Para la empresa Aguas de Saltillo, conocido por sus siglas como Agsal, su mejor aliado ha sido el tiempo, después de soportar férreas críticas durante sus primeros dos años, en el 2001 y 2002; cargo de la operación y administración del agua.

Un proyecto de un alcalde visionario de aquel tiempo, Don Óscar Pimentel González, quien tuve la fortuna de conocerlo y le mando un saludo y fuerte abrazo desde estas líneas de mi editorial Opinión.

Gracias a esta decisión vanguardista del exalcalde Óscar Pimentel González, en la alianza entre un sector público y privado, logró encarrilarse en el 2003 dando frutos y resultados positivos, cumpliéndose muchos proyectos, así como metas.

El camino no fue fácil, ya que hubo saltillenses que se resistieron al cambio, así como a lo vanguardista, siendo uno de ellos mi propio padre que terminó por reconocer el buen trabajo realizado y que a lo personal me hubiera gustado que estuviera vivo para testificar la carencia del vital líquido que sufrió y continúa teniendo, Nuevo León, al grado de que se emitió un estado de crisis de agua y estado de emergencia por la sequía de esa entidad federativa el año anterior.

También quienes sufrieron este problema de la falta del vital líquido fue la cabecera municipal de Torreón, Coahuila; a quien hay que reconocerle a su Alcalde Román Alberto Cepeda González, que en su primer año niveló dicho problema, así como otros, que le había dejado su antecesor del PAN.

Diferentes comunidades locales, así como estatales, volteaban a ver la capital de Coahuila, con envidia de la buena, exclamando solamente: ¡qué padre que allá sí tienen agua!, o ¡qué padre que tengan Agsal!

Fue el tiempo el mejor aliado para Aguas de Saltillo, que, a un más de sus 21 años de estar invirtiendo infraestructura, es ahora saltillo, privilegiado en contar con agua, aunque hay que decirlo que en su trayecto han tenido sus aciertos como también equivocaciones, pero en general los saltillenses no se preocupan de su escasez.

Los hechos hablan por sí solo.  Por ejemplo, la erradicación total, o sí en su mayor parte, de las fugas, el clandestinaje y el robo de agua fue un hecho que salió a relucir con uno de los mayores problemas. Antes de que Agsal tomara las riendas, nadie se fijaba ni decía nada de aquellos que no solo hurtaban el líquido en perjuicio de todos los saltillenses, porque a final de cuentas el agua es cuestión de todos.

Aunque todavía hay fugas, no podemos negarle el mérito a Aguas de Saltillo que sigue combatiendo el hurto del líquido. Y haciendo una pausa en este punto, recuerdo bien que por esos años atrás se procesó administrativamente contra la Sección 38 del S.N.T.E. por las argucias y maniobras que desde hace tiempo hacían para robarse el agua potable y llenar la alberca de sus agremiados sin pagar alguno a la empresa mixta. Un tema que ya no se supo en qué quedó.

No negamos que siguen inconformidades de usuarios por los cobros que consideran en algunos casos injustos y fuera de orden, pero, por otra parte, tampoco podemos cerrar los ojos frente al avance en el abasto de agua que cada vez abarca mayores sectores.

Tampoco debemos ignorar que hasta antes de formarse la tan criticada, por algunos, empresa mixta Agsal, su manejo y administración le costaba al ayuntamiento en turno, o sea que se le metían impuestos de todos nosotros y el desperdicio de agua estaba en todo su apogeo.

Definitivamente que el tiempo ha dado la razón a Aguas de Saltillo, y su reconocimiento a su Gerente General, de cuando inició esta empresa mixta con una institución pública, fue Jesús García, quien aguantó todo y de todos los usuarios y los protagonistas de siempre, siempre clamó paciencia y tiempo para demostrar que mucho se puede hacer con esa sociedad.

Para la Presidencia Municipal de Saltillo, representó un ahorro en el 2001, aproximadamente 21 millones de pesos anuales para pago de nóminas y otros rubros de lo que por años cuando era el Sistema Municipal de Agua y Saneamiento de Saltillo.

Se ha reducido el número de fugas; se está cobrando a muchos que evadían ese compromiso, en fin; hace negocio Aguas de Saltillo y Municipio, porque para eso son las sociedades. Y, por otro lado, se acabaron quienes robaban el agua haciendo negocio a expensas de nuestros impuestos y ordeñando nuestros mantos acuáticos. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org

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