Guillermo Robles

Así le pagamos al mejor amigo del hombre

Por Guillermo Robles Ramírez

Desde el Senado de la República se hizo un llamado a la autoridad de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, debido al incremento del abandono de animales domésticos como son los gatos y perros. Este incremento de abandono aumentó en su proporción con la llegada de la pandemia. Algunas de las posibles causas fueron sin lugar a dudas la desinformación y el miedo a que las mascotas pudieran transmitir el coronavirus dentro de los hogares. También la falta de dinero para mantenerlos alimentados y por último, como siempre ha existido el motivo, es que solamente los quieren cuando son cachorros o pequeños para posteriormente ser abandonados porque los dueños ya nos quieren.

He observado que hay más perros que gatos abandonados en las calles de cualquier ciudad del país. Y aunque en lo personal me inclino más por los perros que por los gatos, considero que empieza a ser un problema de social, porque para comenzar representa un peligro para cualquiera porque la mordedura de los canes no perdona edad, sexo y ni estado civil.  Por otro lado, la contaminación de las eses por donde quiera.

Es lamentable que el ser humano sea tan cruel con el perro domestico, cuando se tiene el dato de la existencia del perro hace más de 30 millones de años. Su antepasado con el que lo relacionamos más parecido a la época moderna de la humanidad, es la figura del lobo, como su ancestral origen, pero el perro doméstico no apareció hasta hace doce mil años atrás.

Probamente fueron los egipcios y los romanos que empezaron a darles un uso de labor, doméstico o simplemente de custodio para los esclavos, pero es definitivamente que ha participado durante la historia de la humanidad dejándonos un registro en nuestra evolución.

Uno de las etapas más marcada fue en la Primera Guerra Mundial, con el adiestramiento de los perros militares. Este era tan específico y tan imprescindible como si fura el de un arma para un soldado porque su importancia era vital para poder hacer llegar los mensajes entre sus tropas, aunque tenían también otras funciones como el sustituir la vigilancia en las noches, transportar heridos y hasta artillería ligera.

En la medida que el ser humano fue avanzando en su historia la vida de los perros fue caminando paralelamente en donde en teoría los perros pasaron de ser animales para las diferentes labores del hombre, a tener una mejor vida como acompañante y en otros casos hasta un miembro más de la familia.

Tenemos que estar recordando constantemente que este animal doméstico le debemos gratitud, e importancia que representaron en algún pasado los perros.  La falta de conciencia e irresponsabilidad de muchos de los dueños de esos perros orilló a la misma sociedad en la necesidad de crear leyes y reglamentos que los protejan, pero también para quien tenga un perro se le estableció derechos y obligaciones.

El tener un animal doméstico tiene obligaciones legales como las que existen en la Ley de Protecciones a los Animales del Estado de Coahuila de Zaragoza, y también aquellas que incumben al mismo rubro en los municipios.

Es imposible para cualquier perrera municipal de Coahuila; poder tener cobertura en una ciudad donde no existe la cultura de la responsabilidad de los canes. Y más cuando la mayoría son abandonados por diferentes circunstancias, ya sea porque no tienen tiempo para dedicarle a su mascota, como es el sacarlo a pasear para que caminen y se desestresen, o la más común que tampoco es justificación el no tener la economía para sus vacunas, así como sus alimentos.

La irresponsabilidad de las personas y falta de conciencia de la ciudadanía en abandonar a su suerte los perros en las calles. Es la causa principal o la única por la cual existe la población callejera canina dentro de las colonias y ciudades; pero también aquellos quienes no cumplen con las vacunas e higiene de estos mismos provocando un problema de salud como es la rickettsiosis.

También la falta de cultura de la esterilización de estos animales domésticos   hace imposible el control sanitario por parte de las autoridades. Y es hasta entonces que se enciende un foco rojo por la sobrepoblación canina en algún sector queremos que actué las autoridades locales siendo algo imposible, por la falta de recursos y personal para solucionar el problema. No olvidemos, ni neguemos al mejor amigo del hombre, que durante siglo le sirvió a la humanidad en diferentes labores. como para pagarle con el desprecio del olvido. (Premio Estatal de Periodismo 2011 y 2013, Presea Trayectoria Antonio Estrada Salazar 2018, finalista en Excelencia Periodística 2018 representando a México) www.intersip.org

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